El argumento socialista de que el federalismo es la única solución viable y posible a la cuestión catalana ha resucitado volviendo con fuerza, esta vez de la mano del candidato a la secretaría general del PSOE y diputado en el Congreso, Patxi López, que tiene claro que "la respuesta está en avanzar en la vía federal" porque considera que "es viable".

López tiene claro que Catalunya "no celebrará un referéndum unilateral", pero también sabe que en el hipotético caso que sí que se hiciera, el artículo 155 "tiene mucha leyenda y no se podría suspender la autonomía". Así lo ha dicho en Els Matins de TV3, donde ha querido poner encima de la mesa que como "un referéndum refrenda un acuerdo, prefiero encontrar un acuerdo previo", motivo por el cual ha propuesto "buscar un acuerdo entre los diferentes y hacer un referéndum entre todos de este acuerdo".

Parar máquinas

Su sugerencia es "parar máquinas en vez de llegar al choque" y, para hacerlo, asegura que lo importante es "buscar puentes entre las diferentes partes, así como hablar seriamente de cómo reformamos el modelo que hay en el país".

Ahora bien. Se ha mostrado de acuerdo con las inhabilitaciones a Artur Mas, Joana Ortega, Irene Rigau y ahora Francesc Homs porque "se han inhabilitado no para cumplir un proceso democrático, sino para desobedecer". Además, sobre la marcha del PDeCAT, ERC y Podemos ha soltado que "no se puede dejar intervenir a un diputado por cualquier cosa".

El candidato a la secretaría socialista se ha lamentado que se utilice las diferencias entre territorios para enfrentarse porque, según su opinión, "tendríamos que reconocer que eso nos enriquece", pero ha cargado sutilmente contra el anuncio de inversiones en infraestructuras de Mariano Rajoy porque considera que "no es la respuesta", sino que "hace falta más política", es decir, según él "se tiene que defender la ley, pero hay que buscar cómo jugamos con la política para encontrar acuerdos".

Volver a la izquierda

Fuera del procés, López también ha hablado de las candidaturas socialistas para presidir la secretaría general del partido -él mismo, Pedro Sánchez y Susana Díaz-. En este sentido, ha cargado contra Podemos, a quien ha atribuido la responsabilidad de la división del PSOE, pero ha querido dejar bien claro que "no hay riesgo de escisión del partido, todo y que sí de mantener la división".

Precisamente por eso, ha puesto de manifiesto que su objetivo es "recuperar el electorado que se fue del PSOE en Podemos, así como recuperar el proyecto de izquierdas que no haga de fusión de confusión con el PP".

Para quien pierda las primarias, se lo tendrá que integrar para devolver la unidad del partido, ha propuesto el diputado socialista, al mismo tiempo que ha asegurado que "si soy secretario general llamaré a los otros candidatos para ver cómo lo hacemos".