La eurodiputada liberal de Ciudadanos y exmiembro de UPyD Teresa Giménez-Barbat advierte que los líderes independentistas han "despreciado" el poder del Estado español para frenarlos. En una entrevista en la ACN, Giménez-Barbat asegura que el 1-O "no habrá un choque de trenes" porque "las fuerzas están muy desequilibradas". "Una nación como la española no se puede comparar, es una maquinaria muy potente", defiende Giménez-Barbat, que niega que retirar las urnas el 1-O con la ayuda de la policía pueda dar mala imagen al Estado español a nivel internacional. "Aunque la foto diera la vuelta al mundo, mucha parte del mundo agradecería que se pusiera un poco de orden a esta situación", destaca.

Teresa Giménez Barbat celebra que "por fin" se ha acabado "el inmovilismo" del Gobierno español con respecto a Catalunya. "Ahora parece que se están moviendo, que están tomando medidas que hasta ahora no se habían tomado", remarca la eurodiputada, que comparte grupo parlamentario con el PDeCAT y el PNV en Bruselas. "La maquinaria del Estado se ha despreciado de forma brutal", avisa Giménez-Barbat, que añade que no tiene "miedo" a que se inhabilite al president de la Generalitat o se suspenda la autonomía. "Yo estoy de acuerdo en que se intervenga proporcionalmente con lo que vaya pasando, naturalmente. La ley está para eso. A mí también me llegan requerimientos y tengo que responder a la justicia como cualquiera. Un president de la Generalitat, más que cualquier otro. Él sabrá dónde quiere llegar", destaca.

Según esta eurodiputada, los catalanes no independentistas no tienen "nada que ver" con el procés y se podrían empezar a movilizar si la situación va a más a partir del 1 de octubre. "Hemos aguantado eso con mucha paciencia", asegura, y añade que "quizás habrá algún momento más complicado", pero que la independencia es solo un acceso de fiebre. "Sentimientos tenemos todos, y seguramente los sentimientos de pertenencia a España que tiene una gran población de Catalunya despertarán de una manera más contundente de lo que se ha visto hasta ahora", pronostica.

El catalán en la UE

La eurodiputada liberal se muestra en contra de la oficialidad del catalán en la Unión Europea porque dice que "hay muchas lenguas, ya, en Europa" y hay que ir hacia "un futuro con menos lenguas". Según Giménez-Barbat, "a la larga el inglés será la lengua más hablada" en la UE y será "el que unirá de manera más fuerte a todos los europeos". "No creo que le haga ningún bien a nadie pedir que haya una lengua más en el Parlamento", afirma, en referencia al catalán. "No solo por problemas económicos, sino porque creo que el camino es otro", destaca. "Vasco, gallego, catalán... eso no terminaría nunca. Forzarlo todavía más no creo que le haga bien ni a Catalunya, ni a España, ni a Europa", afirma.