Esquerra Republicana de Catalunya y Democràcia i Llibertat se reúnen esta tarde, por separado, con Pedro Sánchez, que, a priori, los sentará en la mesa para decirles que no quiere negociar con ellos la investidura. A pesar de todo, la posibilidad, aunque remota, que el PSOE pudiera acabar aceptando algún tipo de compromiso con respecto a la celebración de un referéndum en Catalunya hace que los dos partidos independentistas catalanes todavía no hayan fijado definitivamente su posicionamiento, aunque no iría más allá de una abstención.

El líder de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha señalado que el mismo encuentro es en sí “absurdo”, ya que es ir a ver a alguien “que no quiere hablar con nosotros”. De hecho, Rufián ha ironizado con la posibilidad de que acaben hablando "más de baloncesto”.

En cambio, su número dos, Joan Tardà, se ha referido más explícitamente a su posicionamiento, señalando que ERC decidirá su voto en función de “si hay pacto entre PSOE y Podemos”. “No queremos poner el carro delante de las mulas”, ha asegurado Tardà, para añadir que el pacto entre las dos formaciones españolas tendría que pasar “por el referéndum”. “Un hipotético gobierno progresista sólo se podrá calificar así si reconoce el derecho a decidir de los catalanes”, ha añadido Tardà.

DiL podría abstenerse

Por su parte, el líder de Democràcia i Llibertat en el Congreso de los Diputados, Francesc Homs, ha sido más explícito, asegurando que la posición de salida de su formación es “decir no” a la investidura. Ahora bien, Homs ha señalado que podrían abstenerse si el PSOE “se compromete a un referéndum”.

En este sentido, Homs ha insistido en que el PSOE tendrá que aceptar el referéndum si quiere la abstención de su grupo. "Es una situación rara: no quiere nuestros votos, pero aritméticamente los necesita", ha asegurado el principal representante de Convergencia en Madrid.