Al cabo de 24 horas de que lo hicieran otros países europeos, finalmente España se ha movido frente a la nueva cepa de coronavirus detectada en el Reino Unido. Según ha informado este lunes al mediodía, y de manera concertada con Portugal, el Gobierno ha acordado la suspensión de los vuelos de entrada procedentes del Reino Unido a partir de mañana, excepto aquellos de ciudadanos españoles o residentes en el Estado. De la misma manera se reforzará el control fronterizo de España con Gibraltar. Estados europeos como Alemania o Bélgica ya lo hicieron a lo largo de este domingo.

La decisión se ha producido después de la reunión del mecanismo de crisis de la Unión Europea, que hoy ha analizado los efectos de la nueva cepa de covid-19, y ha pedido evitar todos los viajes no esenciales. El Gobierno había defendido que la acción fuera coordinada de todo el bloque comunitario, en contra de lo que hicieron ayer unilateralmente varios países de la Unión Europea.

Desde La Moncloa subrayan que la medida se ha adoptado "de manera concertada con Portugal". El presidente español Pedro Sánchez ha mantenido este mediodía una conversación con el primer ministro Antonio Costa, mientras el ministro Salvador Illa lo ha hecho con su homóloga portuguesa, Marta Temido. También supondrá un reforzamiento de los controles en la frontera con Gibraltar. La ministra de Exteriores, Arancha González Laya, informará esta tarde en el gobierno británico y a la Comisión Europea.

El Gobierno recuerda que, a pesar de la suspensión de vuelos, ya había controles de seguridad, obligando a cualquier viajero de países en riesgo a presentar un test realizado en las 72 horas previas a la llegada a territorio español.

Reticencia inicial

El Gobierno de España decidió este domingo no suspender los vuelos con el Reino Unido a pesar del riesgo de propagación de la nueva cepa de la Covid-19. En vez de seguir la misma línea de actuación de otros países europeos, como Alemania, los Países Bajos, Bélgica, Francia, Italia y Suiza, España sólo decidió reforzar en puertos y aeropuertos el control de verificación de pruebas PCR a las personas que procedan del territorio británico. Insistió en "la necesidad de adoptar medidas coordinadas sobre los vuelos procedentes del Reino Unido".