El papel que hará España en la celebración del 75º aniversario de la creación de las Naciones Unidas será bien curioso, ya que por una parte, el rey Felipe VI intervendrá el próximo lunes a la cumbre especial de la ONU, y por la otra no ha dudado en reivindicar como suyos a los republicanos exiliados que participaron en la creación del órgano internacional.

En concreto ha sido el Ministerio de Exteriores, que ha destacado la presencia de varios miembros del gobierno republicano en el exilio en la reunión asegurando que "la España democrática también estuvo presente". Ahora, 75 años después, el Estado envía como representante al hijo del sucesor designado por el dictador Francisco Franco.

Los 'representantes españoles' en la fundación de la ONU fueron Álvaro de Albornoz (quién sería después presidente del gobierno republicano en el exilio), Indalecio Prieto (presidente del PSOE entre 1948 y 1951), Fernando de los Ríos (ministro de Estado), Juan Negrín (primer presidente del gobierno republicano en el exilio), Antonio María Esbert, Félix Gordón Ordás (presidente del Consejo de Ministros de la República en el exilio), Julio Álvarez de Bayo (había sido Comisario General de la Guerra) y José Antonio Aguirre (consejero de Defensa del País Vasco).

En un vídeo especial para la ocasión, el gobierno de Pedro Sánchez recuerda que "las Cortes españolas en el exilio solicitaron participar en la conferencia de San Francisco y la Junta Española de Liberación elaboró un memorándum con la contribución de España en los debates".

La moción española que "inspira" a la ONU

Con ayuda de México, se aprobó la "moción Quintanilla" que, según señala el vídeo, "consagró el ideal democrático que inspira a las Naciones Unidas" ya que establece que "no podrán formar parte de la ONU estados cuyos regímenes han sido establecidos por fuerzas militares que han desencadenado la guerra contra las Naciones Unidas".

En 1955, "como consecuencia de la Guerra Fría, el régimen franquista fue admitido en la organización, pero España no ocupará el lugar que le corresponde entre las democracias del mundo hasta 1977, resultado de un histórico proceso de transición democrática".

"Desde aquel momento, España despliega toda su influencia para impulsar los ideales que inspiraron la Carta de San Francisco y lo seguirá haciendo", concluye el vídeo con una imagen de Felipe VI interviniendo ante la ONU en el 2018.