Sean Clerkin, un escocés de 57 años, entró en el consulado de España en Edimburgo pocos días después del referéndum del 1-O y gritó "free Catalonia (Catalunya libre)". También exclamó: "tráiganme al cónsul español". Clerkin había visto la represión policial contra el referéndum y estaba indignado con la actitud del Gobierno español en Catalunya.

El caso ha llegado a la Justicia escocesa presumiblemente por una denuncia del consulado y hoy se ha celebrado la vista con las acusaciones contra Clerkin de comportarse de forma amenazante y abusiva.

El escocés ha negado totalmente la acusación, y ha indicado que era tan sólo una protesta política. El abogado ha añadido que "no fue ninguna acción terrorista". "Este hombre se manifestaba pacíficamente, protestando por todo lo que estaba sucediendo en España", ha indicado, según la televisión STV.

El juicio ha quedado finalmente aplazado hasta el 24 de mayo.