Esquerra Republicana ha llevado la campaña del 28 de abril a las cárceles donde estuvieron los presos políticos. Un acto que el mismo Gabriel Rufián, que se ha desplazado a la prisión de Lledoners acompañado de la pareja de Raül Romeva y candidata a las europeas, Diana Riba, ha calificado de "uno de los más bonitos que he hecho nunca". Rufián ha denunciado el "menosprecio" de los presos en la vida política y ha instado a Pedro Sánchez, Pablo Casado y Albert Rivera a visitar los centros penitenciarios
Al salir de la prisión, Rufián ha prestado una atención a la prensa donde ha explicado el desarrollo del acto dentro del centro penitenciario y las reivindicaciones de que los han hecho. La cincuentena de personas que han asistido habían sido compañeros de los presos durante varios meses y, según ha explicado el número dos de la candidatura de los republicanos, rechazaban el procés judicial contra los líderes independentistas.
Riba también ha reconocido que ha sido uno de los actos con los que "a nivel personal" más se ha implicado y ha recordado que con la mayoría de presos se habían encontrado a los locutorios o a las esperas por los vis a vis con sus familias, durante los meses de encarcelamiento de Romeva. La candidata a las europeas también lo ha calificado de "muy enriquecedor" y ha asegurado que se llevan sus reivindicaciones al Congreso y al Parlamento Europeo.
Rufián sigue evitando JxCat
Por otra parte, Rufián, preguntado por la actualidad en este séptimo día de campaña, ha evitado valorar las palabras del candidato de JxCat Jordi Sànchez, que esta mañana ha apostado por el diálogo con Pedro Sánchez, en su primera rueda de prensa desde que entró en la prisión hace un año y medio, y ha vuelto a desear "toda la suerte del mundo en el espacio postconvergente". Sin embargo, ha calificado de "gran noticia" que Sánchez, y mañana Oriol Junqueras, puedan hacer ruedas de prensa desde la prisión.
ERC ha llevado a cabo este jueves actos simultáneos a tres prisiones diferentes de Catalunya, Lledoners, Puig de les Basses y Mas de Enric, concretamente en las que estuvieron los presos políticos antes de volver a Madrid para el juicio. En Catalunya hay unos 6.200 presos de los cuales sólo un poco más de la mitad tiene derecho a votar, y sólo 349 han pedido ejercer este derecho, según datos del departamento de Justicia.