No le queda ningún pelo en la lengua. Bueno, de hecho no lo ha tenido nunca. Manuel Milián Mestre (Forcall, 1943) fue uno de los fundadores de Alianza Popular, que acabaría refundándose en el Partido Popular. Él fue la voz y el oído de Manuel Fraga en Catalunya. Dicho de otra manera, ejercía para los populares de intérprete del catalanismo político. Hasta que Jose María Aznar cogió las riendas del partido, razón por la que acabó rompiendo el carné en el año 2000. Ya no ejerce, pero continúa conectado a la política desde su despacho inundado de libros y papeles en Foment del Treball. Según Milián Mestre, con Aznar empezó la destrucción del PP, un proceso que acabaría por rematar Mariano Rajoy. No confía en la capacidad de Pablo Casado para reflotar el partido, apuesta por facilitar la investidura de Pedro Sánchez y tiene claro que VOX tiene su génesis en la crisis del PP.

Manolo Milian Mestre PP - Sergi Alcazar

¿Pablo Casado debería favorecer la investidura de Pedro Sánchez?
No sólo debería, si fuera inteligente y hubiera una estrategia correcta en el Partido Popular, tendría que ofrecer el voto positivo o la abstención a Pedro Sánchez para que pueda tener la garantía de no tener que pactar con nadie que después le pusiera en un compromiso. Eso sería visión de estado, cosa que hasta ahora no ha demostrado el PP de los últimos años. Ahora tenía una oportunidad que no ha aprovechado, pero hay una segunda ronda.

Casado tendría que ofrecer el voto positivo o la abstención a Pedro Sánchez

Un sentido de estado que tuvo el PSOE con Rajoy en 2016.
Exactamente.

¿Qué peso cree que ha tenido la cuestión catalana en el fracaso de la investidura?
Yo estoy convencido de que si la investidura ha fracasado es por el tema nacionalista catalán, aunque no haya sido explícito. Por la no fiabilidad de Pablo Iglesias en este aspecto. Por el compromiso ambiguo con la señora Ada Colau. No es fiable y cualquier gobernante que tiene un problema tan grave como es este no puede ir con un socio de esta naturaleza, que distorsionará todo el plan operativo y analítico. Porque no podemos olvidar que el objetivo fundamental del señor Pablo Iglesias es destruir el sistema que tenemos hoy en día en España. Quiere cambiarlo todo y mandarnos a una era postsoviética.

Y todo eso sin que PSOE y Podemos sumen mayoría absoluta, por lo tanto, necesitando el apoyo para gobernar del independentismo.
Y aquí entran en juego dos factores muy peligrosos en esta coyuntura política. Uno es el tema vasco, que comporta una memoria muy cruel. Si ellos tienen los privilegios que tienen es porque han tenido los muertos encima de la mesa, que no me vengan con historias. El señor Suárez se bajó los pantalones delante de los muertos. Ellos lo que quieren es mantener este status de privilegio, por lo tanto harán siempre este acompañamiento pragmático. Pero aquí hay otra parte, los señores que ponían los muertos, que no eran el PNV. Y estos señores quieren redención política. Yo había sufrido las consecuencias de ETA directamente, porque cuando mataron a Ernest Lluch iban a matar a dos personas más, a Luís del Olmo y a mí. Yo pillé al comando en la puerta de mi casa a las dos de la madrugada estudiando mi casa, venía de una cena con Cuní. Avisé inmediatamente a la policía. En definitiva, cuando hay esta cultura de la violencia que han practicado los vascos, eso es un handicap muy grande para poder apoyarte en ellos. Y hay otro factor muy serio, que para mí es un error táctico, que es que ERC se case en el Congreso con esta gente. No entiendo esta alianza con Bildu.

Pero ERC ha acabado adoptando una actitud que denota más sentido de estado que la del PP.
Yo no te digo que no, digo que no entiendo la alianza cuando el contaminante es el País Vasco. Con la posición de ERC en la investidura estoy de acuerdo, pero yo lo habría hecho sin ellos. Pero si lo miramos en la perspectiva general, sí, ERC ha tenido más sentido de estado que Pablo Casado, pero es una posición a corto plazo, utilitarista. Yo le doy apoyo a usted y a partir de aquí algo nos tendrá que devolver. Y aquí la anécdota del libro de cuentos de Junqueras que Rufián regaló a Sánchez fue muy clara. Un analista inteligente se da cuenta de que hay todo un lenguaje gestual que marca un camino. En cualquier caso, aquí ahora el gran problema es Catalunya, no el País Vasco. La estrategia de Catalunya plantea un desafío muy grande para el Estado español. O resuelven este problema o todo quedará envenenado.

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Para resolver un gran problema uno se tiene que sentar en la mesa con quien sea, con Satanás en persona si conviene

¿Y cómo se resuelve el problema si se levantan de la mesa de negociación? ¿No sería más práctico asumir una diálogo bilateral?
Yo creo que para resolver un gran problema uno se tiene que sentar en la mesa con quien sea, con Satanás en persona si conviene. Eso lo he tenido siempre como un principio operativo en la vida pública. La política es el arte de lo posible, ergo tú te tienes que sentar en una mesa para ver cómo domesticas a los catalanes que quieren la independencia y como rebajas ese humo y llegas a un entendimiento. Yo los últimos informes que había hecho iban en este sentido. La propuesta de árbitro, que no relator, sale de un informe mío. Y yo propuse tres nombres: Miquel Roca, López Burniol y Joan Rosell. Catalanes muy reconocidos que podían hacer de puente para estructurar una solución.

Quien hace volar los puentes fue precisamente el PP.
El PP no ha entendido nunca el problema de Catalunya y te lo digo con conocimiento de causa. Te pondré un ejemplo histórico. Cuando se estaba fundando el PP, en Madrid, todavía en vida de Franco, vino Fraga y nos reunimos para cerrar los últimos documentos sobre la estrategia del partido. Éramos unas 10 personas, el núcleo fundacional. Cuando nos encontrábamos en plena discusión todo el mundo daba por hecho que el tema vasco y catalán se resolverían, que se encontrarían soluciones, y que por virtud de la democracia se resolverían los problemas. En aquel momento pedí la palabra para decir que no estaba de acuerdo. Le dije, "Don Manuel, no estoy de acuerdo: los vascos vienen a buscarte y te pegan un tiro en la nuca, los catalanes en cambio nunca te pondrán ninguna pistola ni bomba, sonríen, pero en el momento de la verdad los catalanes te sacan un bisturí y te rajan de arriba abajo, finamente, porque los catalanes somos florentinos, no entramos en el choque, operamos con la palabra y la habilidad". Y Fraga se quedó pensativo. Y desde entonces me consultó cada uno de los pasos que se tomaban en Catalunya. Eso funcionó hasta el año 2000. En el 96, el pacto del Majestic fue el resultado de dos o tres años anteriores durante los cuales Pujol y yo nos reuníamos cada 15 o 30 días para intercambiar información allí en el Palau de la Generalitat. Y yo inmediatamente después enviaba un informe a Fraga, a Rato, que era mi jefe, y a Álvarez-Cascos. Cuando llegó Aznar eso se acabó. Yo creo que el desastre de España y de Catalunya nace con Aznar en el año 2000. Se cargó el cordón umbilical que había funcionado siempre desde la transición, discretamente. Fraga me llamó llorando para que no me marchara del partido, pero yo ya no aguantaba más las miserias del señor Aznar.

Fraga y Pujol se entendieron siempre

Visto con perspectiva, ¿se puede afirmar que el PP ha decidido abandonar a Catalunya? Porque ahora mismo aquí es una fuerza residual.
Mira, voy a hacer una acusación. Para mí ha habido dos personajes nefastos para la historia de España y Catalunya, uno es José María Aznar y el otro es Mariano Rajoy. Y tengo informes que así lo corroboran, que tengo pensado publicar. El señor Aznar no entiende Catalunya, no tiene ni puñetera idea de Catalunya. Empezó en ufanarse de la mayoría absoluta que había conseguido gracias a Pujol y lo acabó mandando a paseo, con aquel 'Pujol, enano, habla castellano'. Fraga y Pujol se entendieron siempre.

Y después aparece Rajoy.
Y en lugar de revisar la estrategia de Aznar, la multiplica, con el error descomunal de poner aquí a una persona que no tiene ni idea sobre Catalunya, la vallisoletana Soraya Sáenz de Santamaría. No sé quién les orientó, sí que sé que el señor Moragas dijo a Rajoy que no sufriera, que los catalanes acabarían enfrentados entre ellos y se resolvería el problema. Y en todo eso hay un elemento clave, la interpretación potencial del efecto anticatalán utilizado diabólicamente para ganar elecciones en España.

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El desastre de España y de Catalunya nace con Aznar el año 2000

Alimentar el anticatalanismo para ganar votos fuera de Catalunya.
Y esta acusación la puedo hacer de manera clara y explícita. Y no sólo eso, hay personas ahora alejadas del partido que lo pueden acreditar. Tengo cartas. Justo hace unas semanas una persona que estaba en el Consejo de Ministros con un cargo muy alto me escribió diciendo que este fue el gran error de aquellos personajes. La suma de errores de Aznar y Rajoy por vía del utilitarismo electoral lleva al desbarajuste donde estamos ahora. Y ya el despropósito mayor es enviar aquí a la señora Álvarez de Toledo. Hay una carta mía a Casado el día siguiente de las elecciones, haciéndole una crítica feroz como fundador del partido, por la barbaridad que había hecho en Catalunya y el despropósito máximo que había sido traer a esta señora.

¿Y hubo respuesta?
Sí, la tuve hace un mes. Dice que no me desanime, que el partido volverá a florecer en Catalunya. No tiene ni idea. Es imposible.

¿O sea que el PP no tiene futuro en Catalunya?
Tal como está ahora, no. Hay una gran parte de Catalunya que está políticamente huérfana. Por ejemplo yo, que no sé a a quién votar. Yo aquí no encuentro partido.

Aznar y Rajoy son dos personajes nefastos para la historia de España y Catalunya

¿Ciudadanos puede llegar a ocupar el espacio del PP?
No. Ciudadanos es una amalgama. No tienen una identidad de origen, tienen una oportunidad de origen, que es hacer de partido bisagra para equilibrar, que es a lo que jugaba Jordi Pujol con CiU. A partir del momento en que quieren renunciar a esta carta para aspirar ellos a liderar la derecha, la pifian. No veo salida a la actual estrategia de Cs. El PP ha cometido un error descomunal, la prostitución de la corrupción. Se ha prostituido. Un partido que nació como democristiano, con una visión ética muy severa, ha apartado su partida de nacimiento y se ha convertido en el pragmatismo de los intereses de los bolsillos y las carteras. Y eso ha sido un desastre que se ha producido a partir del señor Aznar. Cuando llega el señor Aznar estalla el escándalo de Valencia. La corrupción de verdad llega con Aznar. Y Rajoy no lo para. Se han pervertido las esencias del PP. O el partido se reconcilia con sus ideas fundacionales o no tiene futuro.

¿Y eso lo puede hacer Casado?
Si lo sabe entender, podría ayudar a hacerlo, pero creo que el PP hoy en día no tiene un líder de verdad. Le falta consistencia.

Manolo Milian Mestre PP - Sergi Alcazar

El PP ha quedado destruido, empieza Aznar y lo remata Rajoy

¿VOX es ultraderecha?
VOX a veces se expresa en la ultraderecha. Me temo que dentro de VOX hay un refugio del falangismo y del franquismo. Si tú consideras que el franquismo es ultraderecha, como fue evidentemente, pues VOX es ultraderecha. Sus componentes son el resentimiento, un resentimiento a ETA evidente; el anticatalanismo, que lo proyecta a su fundador Vidal-Quadras; el neofranquismo y la derecha fascista.

¿Por lo tanto, la crisis que vive el PP explica el nacimiento y el auge de VOX?
Sí, no tengo ninguna duda. El ala más radical del PP se ha ido a VOX. Quien ha cultivado a Abascal es el PP, Esperanza Aguirre y compañía.

Lo digo porque hay quién dice que es VOX es consecuencia del independentismo.
No. VOX es consecuencia de la deflagración que se produce en el seno del PP. Se marchan unos radicales que no están de acuerdo con la tolerancia que el PP expresa con Catalunya. Tolerancia que la expresan de manera muy gráfica Rajoy y Soraya, que de boca dicen muchas cosas y después no hacen nada. Porque hablaron de la Operación Diálogo pero aquí no hicieron nada. El partido ha quedado destruido, empieza Aznar y lo remata Rajoy. 
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