Con la probable convocatoria de unas elecciones para el 26J, los grupos catalanes empiezan a afinar estrategias. Democràcia i Llibertat (DiL) presiona a ERC por la posibilidad de formar una lista unitaria, como avanzaba este diario, con el objetivo de sumar esfuerzos para superar En Comú Podem. Ahora le ha tocado el turno a este último. Según ha podido saber El Nacional, ECP estudia dos alternativas para lograr obtener grupo parlamentario propio, una promesa electoral que no se había podido satisfacer.

En un encuentro con el presidente del Congreso, Patxi López, la alcaldesa de Barcelona, ​​Ada Colau, indicó hace unos días su voluntad de que se reeditara "la fórmula de éxito" de la lista formada por Podemos, Iniciativa y Barcelona en Comú. Sin embargo, el principal reproche que ha recibido la coalición durante este tiempo era haber tenido que confluir en el grupo plurinacional de En Marea, Podemos y el mismo ECP. El precedente supondría un escollo con el advenimiento de nuevos comicios, y un reproche por parte de los opositores. Si los comunes consiguen su objetivo, serían entonces el partido catalán con el grupo mayoritario en el Congreso.

De coalición a partido instrumental

La mesa del parlamento español no permitió a los comunes grupo propio el pasado 20 de diciembre, alegando que habían concurrido con Podemos a las elecciones, y aquellas fuerzas que no compiten no pueden ir separados. La aritmética de la mesa tampoco ayudaba: Había tres miembros del PP, dos del PSOE, dos de Ciudadanos y dos de Podemos (uno de ellos de ECP). El líder de ECP, Xavier Domènech, culpó al PSOE del veto a su grupo, e indicaba que "hubo un punto en el que llegó a parecer que nos estaban planteando este juego [el grupo] a cambio de la investidura" .

ECP afirmaba haber cumplido los requisitos necesarios: El 15% de los votos en todas las circunscripciones donde se presentaban y un mínimo de cinco escaños. Pero no fue suficiente para sus fines, y este año estudian la posibilidad de presentarse en forma de partido instrumental ante la Junta Electoral Central. La marca ya es suya, fue registrada el 21 de enero, y sólo habría que usarla como tal, con el objetivo de presentarse a las elecciones.

Una segunda fórmula podría pasar por presentarse como partido en alianza con uno de los miembros de la lista presentada el 20 de diciembre. Es decir, que la marca constara, por ejemplo, "En Comú Podem / Barcelona en Comú", o bien "En Comú Podem / ICV". Más dificultades tendría posiblemente "En Comú Podem / Podemos" por la posibilidad de que la mesa volviera a alegar el argumento de la no competición. La presencia del segundo nombre permitiría disfrutar de ventajas como los minutos publicitarios, asignados a las formaciones que ya tienen presencia parlamentaria. Asimismo podría servir para recibir cierto financiación que corresponde a aquellas que tienen cierto número de diputados.

Las fuentes consultadas aseguran que es un debate que está abierto dentro de la formación. Coinciden en el hecho, tal como afirmó Domenech en una entrevista con El Nacional, que existe un "espacio político" en Catalunya que quieren aprovechar. Este pasa por una alternativa que defiende la socialdemocracia y el derecho a decidir. Su estrategia como proyecto es de largo recorrido, por lo que la articulación jurídica se verá supeditada a la voluntad de consolidarse más allá del corto plazo.