La alianza con Esquerra Republicana y la dependencia directa de Pedro Sánchez del independentismo catalán tiene sus efectos. Durante el pleno extraordinario del Parlament para responder a la decisión de la Junta Electoral Central de apartar al president de la Generalitat, Miquel Iceta ha dejado claro que su grupo no la comparte. Y ha añadido: "Para defender nuestras instituciones, vamos juntos".
A criterio de los socialistas catalanes, "la JEC se habría tenido que inhibir", porque "la eventual inhabilitación" del president "sólo puede derivarse de una sentencia judicial firme". El líder del PSC ha explicado que sólo aceptarán que se cese a Quim Torra si quien lo hace es el Tribunal Supremo. Asimismo, se ha sumado a las tesis que apuntan a una maniobra del conservadurismo español para atentar contra el acuerdo ERC-PSOE. "Nada de lo que está pasando estos días es ajeno al debate de investidura", ha sentenciado.
Las palabras de Iceta van en línea con la propuesta de resolución que su partido ha presentado en el Parlament. Si ayer ya expresaron sus "serias dudas" sobre el hecho de que la Junta Electoral Central, un órgano administrativo, tenga competencia para apartar a un president de la Generalitat, hoy han ido un paso más allá. Los de Iceta han presentado una propuesta de resolución en la cual "invitan" a la Mesa del Parlament a presentar un recurso contra el acuerdo de la JEC.
En esencia, el contenido de la resolución del PSC coincide en algunos aspectos con algunos apartados de la de JxCat, ERC y la CUP. Concretamente, los socialistas catalanes "constatan que las causas de cese del president están previstas en el Estatut, en la ley de presidencia y en el reglamento del Parlament" y que la sentencia de inhabilitación del TSJC contra Torra, que ha motivado el veredicto de la JEC, "no es todavía firme".
Por lo que se refiere al escrito que propone Catalunya en Comú, el espíritu es prácticamente calcado al de JxCat, ERC y la CUP, pero modula más el tono y evita cualquier referencia a la autodeterminación. El texto critica que la JEC "se ha extralimitado en sus funciones, vulnerando el derecho al sufragio pasivo" y rechaza tanto la decisión de inhabilitar a Torra como a Junqueras. Lo remata vinculando la resolución de ayer a una "estrategia de la derecha y la extrema derecha para interferir en el debate de investidura".