El PDeCAT contribuirá a todas las elecciones convocadas los próximos meses -generales, municipales y europeas- como JxCat, según ha informado esta noche la dirección del partido al consejo nacional demócrata, reunido en Barcelona. El presidente del PDeCAT, David Bonvehí, ha explicado que el mes de junio, una vez superados los comicios se formalizará la confluencia que tiene que convertir JxCat en un "espacio de encuentro" del PDeCAT con la Crida.

Los demócratas ya disponen de un órgano de coordinación de la cúpula de este espacio que se reúne semanalmente y que tendrá que servir para organizar esta articulación entre las diferentes organizaciones.

El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha intervenido a través de videoconferencia en el consejo nacional para defender que JxCat sigue siendo la "mejor fórmula" y para pedir al PDeCAT que mantenga la apuesta por la unidad y por incorporar gente de fuera del partido.

La reunión del consejo ha servido para constatar el malestar entre la militancia demócrata por la forma como se desarrollaron las primarias que el partido celebró el sábado pasado. De hecho, el mismo Bonvehí ha entonado una autocrítica y ha admitido que no se sentía satisfecho de como habían ido las asambleas, las cuales ha admitido que en la mayoría de comarcas no habían conseguido la participación mínima exigible.

No ha sido el único. Diferente intervenciones de miembros del consejo han lamentado que la forma como se convocaron las primarias no facilitaron ni la presentación de candidaturas ni la participación. De hecho, el defensor del militante ha intervenido para explicar que había recibido muchas quejas.

En el trasfondo de las primarias del sábado aparece el pulso que vive el PDeCAT desde hace semanas sobre la estrategia a seguir en Madrid: por un lado, la línea que habían impulsando en el actual grupo parlamentario los diputados Carles Campuzano, Jordi Xuclà y Ferran Bel con Marta Pascal desde el Senado, partidarios de negociar en el Congreso las políticas del gobierno; y por el otro, el sector que representa Míriam Nogueras, dispuesto a asumir una política de bloqueo que obligue al Estado a negociar con el independentismo.

En este pulso, las primarias se han acabado convirtiendo en un intento de Campuzano, Xuclà y Pascal, que se enfrentaron con Puigdemont en el congreso del PDeCAT del verano pasado y perdieron, de recuperar terreno ante el sector de Nogueras. No obstante, en el partido se da por descontado que las listas de Barcelona, Lleida y Tarragona estarán lideradas por presos, tal como se ha anunciado, y que ni Campuzano ni Xuclà optarán a renovar el escaño.

De hecho, aunque los nombres que formarán parte de la candidatura todavía no se han concretado y hará falta un nuevo consejo este fin de semana, este debate y la estrategia que hay que seguir en Madrid ha provocado un intenso intercambio de opiniones, en el cual han intervenido el mismo Campuzano, o el diputado de Parlamento Lluís Puig, frente a miembros del consejo que han defendido la línea política de Puigdemont y la necesidad de renovar las listas. Entre estos últimos han tomado la palabra un estrecho colaborador de Puigdemont, Joan Maria Piqué, el alcalde de Sant Climent de Llobregat, Isidre Sierra, y el senador Lluís Cleries.

La intensidad del debate ha hecho saltar chispas con la presidenta del consejo, a Mercè Conesa, que ha querido intervenir desde la presidencia lo cual ha generado críticas entre los asistentes.