"Si el número de personas que mueren de hambre en el mundo fueran santcugatenses, en dos días sería un pueblo deshabitado". Es una de las frases que Arcadi Oliveres pronunció en una de sus clases y que hoy ha recordado una de las alumnas presentes aquel día, en el homenaje en recuerdo de su figura. Durante el acto, celebrado esta tarde en el Monasterio de Sant Cugat, el presidente de la Generalitat ha anunciado que su Gobierno le concederá la Medalla de Oro a título póstumo.

Referente de las luchas sociales, Oliveres murió el pasado 6 de abril víctima de un cáncer de páncreas con 75 años. La Universidad Internacional de la Paz, que él fundó el año 1984, ha organizado la celebración, que ha contado con la presencia de sus familiares y amigos y la participación de representantes de entidades sociales, que han leído el libro Palabras de Arcadi, publicado por el economista pocos meses antes de fallecer.

En el discurso de clausura, Aragonès ha alabado la vida y obra de uno de los símbolos destacados del pacifismo. Plantó, ha remarcado "semillas colectivas de esperanza y compromiso", "lejos de los dogmatismos y las ortodoxias", pero siempre con el "compromiso de revertir las injusticias". 

La relación con el procés

"Soy independentista, pero no es la cuestión que más me preocupa", había manifestado Oliveres. Siempre se mostró comprometido con el procés soberanista, pero no dudó en expresar sus recelos con lo que consideró una precipitación en octubre de 2017. En las elecciones impuestas por la intervención del 155 apoyó a la candidatura de la CUP. Sin embargo, su interpretación casaba con la actual estrategia de Esquerra Republicana, que apuesta por ganar a más aliados a la causa, especialmente en lo que él denominaba "periferie barcelonesa".

La cantera de los comunes

En el año 2013, en pleno apogeo del 15-M, al lado de la monja Teresa Forcades, Oliveras impulsó el movimiento Procés Constituent. Un intento de aglutinar en una misma plataforma todas las voces que representaban la izquierda alternativa del momento. Si bien aquel proyecto no se acabó consolidando, fue la cantera de futuros dirigentes políticos de la órbita de los comunes, como Jaume Asens o Xavier Domènech.

En la imagen principal, un retrato de Arcadi Oliveras. / Guillem Medina