El conseller de Interior, Miquel Sàmper, considera "muy posible" que el Gobierno haga llegar al ejecutivo catalán la propuesta para aplicar el toque de queda. En una entrevista en RAC1 ha alertado de que "la pandemia puede detener las elecciones" porque "sólo con que se limite en un 1% el acceso de la gente que no pueda votar, las elecciones estarían viciadas".

En este sentido, han pedido un informe al síndic de greuges sobre en qué situación se considera que hay "una preservación del derecho de sufragio activo y si una situación de pandemia lo puede limitar". Las elecciones en el Parlament de Catalunya están previstas para el 14 de febrero, después de que el Tribunal Supremo diera firmeza a la sentencia de inhabilitación del president Joaquim Torra.

El presidente del Parlament, Roger Torrent, ya confirmó que no hay ningún candidato a la presidencia y, por lo tanto, se ha puesto en marcha la cuenta atrás para la convocatoria electoral. Pero ahora Sàmper añade el interrogante de si el coronavirus permitirá o no poder hacer con seguridad sanitaria y seguridad democrática los comicios, que también mantienen divididos a los dos socios de gobierno.

Sàmper y las restricciones

El conseller ha dicho, también, que el Govern quiere ser "menos intervencionista" en la segunda ola, pero visto que "no se hace excesivamente caso a las medidas pedagógicas", estudia más restricciones. De hecho, Sàmper llegó a pedir a la ciudadanía que avisara a la policía si detectaba infracciones o gente saltándose las medidas.

En caso de que se aplique el toque de queda en Catalunya limitando la movilidad por la noche, el Govern podría aplicar medidas "menos restrictivas" durante el día. El conseller ha dicho que están "valorando" si acompañar lo que supondría una limitación de la movilidad en las noches con "otras medidas que por ejemplo no hagan tan dura la pandemia a nivel de parar la economía".