“Lo que genera incertidumbre es la falta de respeto, la indecisión”. Con esta afirmación ha arrancado el hilo argumental del president, Carles Puigdemont, para exponer esta mañana a los asistentes en la Trobada Empresarial dels Pirineus las razones que explicarían el proceso soberanista como motor económico.

Hace meses que una de las preocupaciones del Govern es desactivar el discurso que intenta combatir el independentismo alertando de los riesgos que comporta para el crecimiento de la economía. Y hoy el president ha querido ofrecer una peculiar master class en este sentido.

El eje central es que “en un país que se estima lo suficiente como para defenderse vale la pena invertir”. La razón sería que los inversores saben que en ese país la gente “se dejará la piel” para defender la competitividad, es decir, sus infraestructuras, la formación, los colectivos vulnerables, el paisaje... “Un país movilizado y comprometido con él y con el mundo genera confianza”, ha remachado para añadir a continuación que el inconveniente es cuando depende de otros que no tienen el coraje de tomar decisiones.

Puigdemont ha avalado sus palabras con datos sobre inversión, exportaciones, ocupación... Y ha insistido en que el problema no es la incertidumbre, sino la capacidad de decidir, por lo cual ha instado a los representantes del mundo económico a “tener el coraje de tomar decisiones en la buena dirección”.

Preocupación por la CUP

Las explicaciones del president, sin embargo, no han acabado de convencer a los empresarios que han dedicado la mayor parte de las preguntas a interrogarlo sobre la CUP. ¿Cómo podemos estar seguros de que usted defiende la propiedad y la iniciativa privada mientras está aliado con un partido que está radicalmente en contra?”, le han pedido.  

Ante las preocupaciones de los presentes, Puigdemont ha asegurado que la CUP no tiene “ninguna” influencia en la acción de gobierno, que el Ejecutivo se basa en el programa de Junts pel Sí, que hay líneas rojas y que, cuando la CUP ha querido superarlas, el Govern se ha plantado. “Que nadie sufra, la acción de gobierno quien la manda, la inspira, la guía y dirige es el grupo de JxSí”, ha garantizado.

Independencia o decadencia

El presidente ha querido dejar claro, que la cuestión no es si sacar adelante la independencia aliados con la CUP o no, sino que “la elección es entre independencia o decadencia”. “No hay otra opción”, ha remachado.