Nuevo paso para el enfrentamiento entre Meritxell Batet y Carles Martí para liderar la lista del PSC el 26-J. Tanto Martí como Batet han expresado este lunes por carta, que han dirigido a la secretaria de Organización Assumpta Escarp, su voluntad de entrar en el proceso de primarias, después de que durante este fin de semana no hayan sido posibles conversaciones entre ellos para evitarlas.

"Es un tema de orden práctico", han expresado a El Nacional fuentes de la candidatura del exsenador, intentando quitar importancia al hecho de que no se haya producido ni un solo contacto telefónico, después de que el viernes se emplazaran a intentar buscar una solución antes de este lunes. Apuntan a las dificultades derivadas de una agenda apretada por parte de Batet, como es el Comité Federal del PSOE del sábado y la manifestación tradicional de la izquierda el 1 de mayo. 

Así, con sólo cinco minutos de conversación entre los dos candidatos al salir de la ejecutiva extraordinaria del PSC el viernes, el equipo de Martí reconoce que se ha visto obligado a tomar el derecho. El plazo para expresar la voluntad de competir para encabezar la lista por Barcelona eran las 10h de la mañana de hoy, y si no lo hacían se quedaban definitivamente fuera. "Necesitábamos formalizarlo", argumentan, si bien siguen confiando en el acuerdo.

Voluntad de acuerdo

Todavía hay margen. Hasta el viernes, momento en que culmina la recogida de avales, hay tiempo todavía para frenar el proceso participativo. "No es fácil, en absoluto", admiten fuentes de la candidatura de Martí a este diario, pero aseguran que lo intentarán.

De momento, no se detienen. El equipo del socialista ha entrado en pleno funcionamiento, con más de cincuenta personas repartidas por todo el territorio que tratarán de recoger el aval de 869 militantes, descartando así la vía de los 82 miembros del Consejo Nacional. "Lo vemos posible", afirman. 

El logotipo, que enfatiza en el "CAT", busca potenciar la idea de una diferenciación con la candidatura madrileña, delante de una Batet que llega con el beneplácito directo del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. El mensaje político que busca es "renovación", en línea con el objetivo, que ya ha expresado, de hacer un cambio de nombres a la lista, porque considera que estas generales anticipadas "no son una segunda vuelta". 

Cartel de campaña de la candidatura de Carles Martí

¿Y si no hay acuerdo?

En caso de que finalmente esta semana Meritxell Batet y Carles Martí no se lleguen a entender, el viernes la dirección del PSC tendrá que contar los avales de cada candidatura para ver si han alcanzado los mínimos exigibles, 869 militantes o 82 miembros del Consejo Nacional. Si los dos cumplen, partir de entonces se iniciaría la pugna sin vía de retorno y el 14 de mayo los militantes decidirían con quién se quedan para ser la cara visible del partido en la capital española.

En caso de que por el camino uno de los dos quede fuera, los mecanismos internos del PSC no prevén ir a primarias con un solo candidato para votar. Así, tal como pasó con ocasión del 20-D con el dirigente socialista de Masquefa Daniel Gutiérrez, que intentó enfrentarse a Chacón pero no reunió los avales suficientes, este candidato sería ratificado por el Consejo Nacional, en vez de la militancia.

A pesar de todo, no parece que ninguno de los actores tenga ganas de ir a primarias. De hecho, Batet ha remarcado hoy en una entrevista en Catalunya Ràdio que sería una buena noticia que Martí se retirara. Tampoco lo quiere Iceta que entiende que el enfrentamiento puede debilitar el partido, y se decanta por la figura de Batet con el fin de intentar mejorar los resultados de Carme Chacón el 20-D.