Más fácil no lo podían tener. Los empresarios familiares y el Vaticano han permitido al trío de diarios antigubernamentales de Madrid marcarse unas portadas impresas de lo más nacional, con un punto burlón, contra el gobierno de Pedro Sánchez.

Por una parte, el mismo Sánchez ha recibido unos pescozones en el Congreso de Empresa Familiar, que no es que sean TODOS los empresarios, pero hacen ruido. A ver, es normal. Si un gobierno quiere subir los impuestos y cargas (el salario mínimo, recuerda) a los empresarios y después les visita, los tales empresarios le dirán de todo menos guapo. Así que es legítimo pensar que las portadas con tantos aspavientos sobre la bronca (El Mundo) y la reprimenda (ABC) de los empresarios son una exageración.

ME

ABC

Por otra parte –y esta es peor– Carmen Calvo, la vicepresidenta, se ha ganado un desmentido de la Santa Sede mientras se hacía la listilla intentando endosar al Vaticano el muerto, nunca mejor dicho, del Valle de los Caídos. Es muy extraño que el Vaticano haga este tipo de mentís. De natural, es un actor público más bien prudente, paciente y flemático. Hace unos dos mil años que se dedican a la diplomacia al por mayor y al detalle, entre otras cosas porque es así como han salvado la piel –sea dicho literal y figuradamente– durante todos estos siglos.

La cosa ha ido así. Hace tiempo, los Franco –que se las saben todas– adquirieron una cripta en La Almudena, la catedral de Madrid. Cuando el gobierno socialista decretó el traslado forzoso de los restos del dictador, otorgó a los Franco quince días para escoger un lugar donde enterrarlo (al cadáver, no al gobierno). En la catedral de Madrid tenemos un hueco, dijo la familia. La catedral está en el centro antiguo, al lado del Palacio Real, a unos centenares de metros del Senado, la Plaza Mayor, el Arco de Cuchilleros, la Puerta del Sol e, incluso, de la Chocolatería San Ginés y del bar donde cuelga la cabeza del toro Segador, que fue personaje famoso de la crónica política.

Del Valle a la Catedral

Es decir, que la momia de Franco saltará del Valle de Los Caídos, donde sólo acuden los fans, al mismísimo enmedio de la ruta por donde transitan miles y miles de turistas japoneses, norteamericanos, franceses y etcétera.

Viendo que es peor el remedio que la enfermedad, el gobierno español ha acudido a todo correr al Secretario de Estado del Vaticano, a ver si pueden ordenar por favor al obispo de Madrid que evite que Franco repose en la catedral. De paso, si decían que no o daban largas, podrían culpar a "Roma" del desbarajuste. Win-win.

Pero no. El Vaticano ha respondido a mí qué y que convenzan a la familia, que tiene todo el derecho de enterrar al pariente en la cripta de su propiedad, que por eso cadáver y cripta son suyas. Para más inri, Calvo ha quedado como una pocapena y habrá tenido que oír si no sabe que un obispo es casi plenipotenciario en su territorio y que el Secretario de Estado no manda sobre las diócesis ni sobre sus titulares. Una visita inútil, vaya.

El monigote que Carmen Calvo quería colgar al Papa ha acabado cayendo encima de todo el gobierno español. Aquí es donde las portadas mojan pan. El Mundo, que casi ha perdido su retranca y se enfurece con mucha solemnidad, hace un titular como un martillazo. Exagera, porque es improbable que Roma organice una "crisis" por la momia de un dictador. La Razón hace una pancarta con la rectificación. ABC combina amabs cosas –y las exagera, como El Mundo.

LR

EP

El País se ha quedado solo festejando que Ciutadans ha descorrido el cerrojo de la tramitación de los presupuestos. Da un poco de pena tanta ilusión, porque el mismo diario esconde que la maniobra de Cs tiene poco que ver las cuentas de Sánchez (ya han dicho que no los aprobarán), sino que es su manera de enviar el mensaje de que no son un partido de bloqueo, como el PP de Pablo Casado, sino de pacto, acuerdo, diálogo y tal Pascual.