Las dieciséis personas arrestadas el 16 de enero pasado por el corte de las vías del AVE en Girona en el aniversario del 1-O denunciarán al Cuerpo Nacional de la Policía por detención ilegal y lesiones. Entre los detenidos había los alcaldes de Celrà y Verges, los dos de la CUP.
La decisión se ha anunciado este jueves en la capital gerundense en el marco de una campaña de apoyo a los veintiuno investigados por estos hechos, denominada "21 razones".
La letrada Montserrat Vinyets ha mantenido que las detenciones fueron "ilegales" y que "no había un caso de delito flagrante ni había ningún motivo que hiciera pensar que estas personas no hubieran comparecido en el juzgado si hubieran sido citadas". La abogada ha explicado que el alcalde de Verges, Ignasi Sabater, sigue de baja por las lesiones que le causaron los agentes en una muñeca cuando lo esposaron en la salida de su casa de madrugada.
Los alcaldes Ignasi Sabater (Verges) y Dani Cornellà (Celrà)
En total, hay 21 investigados, veinte por la acción que se llevó a cabo la mañana del 1-O pasado en el AVE, uno de ellos menor, y otro por una acción desarrollada ante la Delegación de la Generalitat, por la que los Mossos lo acusan de ultraje a la bandera, daños, desórdenes públicos y lesiones.
De todos los que tienen que ver con los sucesos en la estación del tren de alta velocidad, diecinueve están acusados por la Policía Nacional, mientras que el otro lo está por los Mossos d'Esquadra. Entre los detenidos se encontraba el fotoperiodista de El Nacional, Carles Palacio.
La denuncia también recogerá que los abogados aseguran que tuvieron problemas para entrar con sus clientes en la comisaría policial de Girona para hablar catalán.
El juzgado de instrucción 4 de Girona, que lleva el caso contra los 21 investigados, ha citado a uno de ellos el 7 de marzo y el resto el 15 de marzo, por el que se han convocado concentraciones los dos días.