La refundación de la CUP, que se puso en marcha después de las dos derrotas electorales de este 2023, ha vivido hoy una jornada importante en la Fira de Girona, donde se ha celebrado un primer congreso de debate donde los militantes -y también personas que no forman parte del partido, pero se sienten próximas a él- han analizado y se han replanteado la propuesta política del partido. El objetivo, han reiterado desde el grupo motor del Procés de Garbí, es conseguir ser "más y mejores" y una herramienta más útil para conseguir los objetivos de la candidatura de unidad popular. Estos, de hecho, son el único elemento que no está a debate durante el proceso de refundación: la independencia, el feminismo, el ecologismo y el socialismo. En total, se han reunido unas 650 personas en Girona -la única capital del país donde gobierna el independentismo con Lluc Salelles al frente- en un espacio donde años antes había una pista de hielo que el ayuntamiento ha suprimido ante la grave situación de sequía. "Tenemos malas noticias para todos aquellos que nos querrían vencidas. Estamos dispuestas a asumir el reto que se nos plantea", ha advertido Non Casadevall, a uno de los portavoces del grupo motor del Procés de Garbí durante el acto político que se ha celebrado tras los debates.

Sin renunciar a nada: ni a la calle ni a las instituciones

El encargado de abrir este acto ha sido precisamente el alcalde de la ciudad, Lluc Salellas, que ha ejercido de anfitrión y ha puesto Girona como ejemplo del crecimiento de las candidaturas vinculadas a la CUP en las últimas décadas: "Hace 20 años tuvimos un 1% de los votos y en mayo 8.000 personas nos votaron. Somos un proyecto que ha ido creciendo", ha señalado el alcalde, que al mismo tiempo ha lamentado que para la CUP funcionaba mejor el contexto social que había años atrás "con plazas ocupadas por jóvenes y miles de personas en las calles pidiendo la independencia" pero que ante el cambio del momento político el partido se tiene que saber adaptar con nuevos horizontes políticos para incidir y transformar la realidad política".

Salellas ha insistido así en la importancia de un "proyecto nacional claro, independentista, de lucha de clases y ecologistas" y sobre todo en que este vaya más allá de los límites de la CUP: "No podemos interpelar a una minoría politizada sino al conjunto de las clases populares". En la misma línea ha dejado claro que los cupaires "no pueden renunciar a nada" ni en la calle ni a incidir desde todos los ámbitos donde puedan tener poder de decisión, poniéndose a él mismo como ejemplo: "Soy alcalde de una institución con muchas limitaciones, pero prefiero que gobierne la unidad popular a qué lo haga cualquier otro".

"No solo estamos refundando a la CUP, estamos refundando el país"

También ha participado del acto político Laure Vega, miembro del secretariado nacional del partido que ha pronunciado uno de los discursos más emocionantes de la jornada, muy aplaudido por los militantes y simpatizantes. Entre ellos, había caras conocidas del partido como David Fernández, el exlíder del partido en Madrid Mireia Vehí, o los diputados de la formación en el Parlamento. Vega se ha mostrado convencida de que su partido "lo podrá todo", dejando claro que la unidad popular no puede ser un movimiento minoritario: "Necesitamos a todo el mundo en el barco, tenemos que crecer para que seamos de todo el mundo. Tenemos que construir una cosa enorme. No solo estamos refundando a la CUP, estamos refundando el país. Estamos esmolant les eines", ha exclamado Vega entre fuertes aplausos de la militancia.

Vega ha hecho referencia a la polémica protagonizada por alcaldes de Junts per Catalunya en el Maresme que se han mostrado partidarios de expulsar en migrantes multirreincidentes, acusándolos de racistas y recordando que "fueron los inmigrantes los que construyeron este país". También ha habido reproches durante el acto político dirigido al Govern de la Generalitat y especialmente a una conselleria de Educació que han tildado también racista después de la respuesta a los malos resultados en el informe PISA.

Ahora, la segunda fase del Procés de Garbí

Los encargados de cerrar el acto han sido los portavoces del grupo motor del Procés de Garbí, Non Casadvall y Maria Gordillo, que se han mostrado muy satisfechos del transcurso de la jornada, pero al mismo tiempo han advertido que la refundación no se acaba con los debates del congreso de este sábado, que ha servido para el reencuentro de la militancia, sino que apenas está empezando. "Mañana tenemos trabajo, iniciamos una segunda fase, que tiene que servir para llevar el proceso al territorio, con debates nacionales temáticos, también territoriales... Tenemos que volver a demostrar que es la inteligencia colectiva y la participación de los militantes la clave que nos servirá para encontrar las respuestas correctas", han explicado. La sensación, con todo, después de este primer encuentro tenía regusto de victoria: "Seguimos siendo imprescindibles".