La situación de sequía levanta polvareda entre la oposición y el Govern. El PSC ha instado a la consellera de Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural, Teresa Jordà, que "abandone la retórica y pase a la acción" ante la situación de excepcionalidad. En opinión de los socialistas, es necesario que se desarrollen "nuevas infraestructuras", destacando que "la última gran inversión se hizo el año 2009 con la desalinizadora del Prat cuando José Montilla era president". "Usted, consellera Jordà, ha hecho declaraciones en el sentido que hay sequías cada 10 años, cuando la misma Agència Catalana de l'Aigua advertía en el 2019 que habría una disminución del agua del 20%", ha criticado la diputada del PSC, Sílvia Paneque.
Desde el PSC, critican que las medidas aprobadas por el Govern y que entraron en vigor este martes contemplen un régimen sancionador para aquellos municipios que, eventualmente, puedan superar las dotaciones de consumo fijadas en el plan de sequía. "Esta medida no hará aflorar ningún metro cúbico de agua, porque el problema que tenemos es estructural. Menos sanciones a los municipios y más inversiones al ciclo del agua", ha lanzado Paneque.
La CUP también ha preguntado al Govern en la sesión de control de este miércoles sobre la sequía. El diputado Dani Cornellà ha acusado al ejecutivo de ir "tarde" ante esta situación en la que "todos los datos nos indican que será la nueva normalidad". Desde la óptica de los cupaires, el Govern "no ha tenido suficientemente en cuenta el territorio" en el decreto ley de medidas extraordinarias por la sequía excepcional y sostienen que estas van "en la dirección contraria a dar una respuesta de fondo". "Son medidas parche porque la principal problemática de los próximos años en los países de la cuenca mediterránea será la falta de recursos hídricos", ha señalado Cornellà. En esta línea, el diputado ha hecho un llamamiento a "revertir el modelo de país" con respecto al turismo: "El modelo basado en el crecimiento del turismo comporta una intensificación del consumo hídrico, los macroproyectos y los macroacontecimientos tienen un fuerte impacto medioambiental y hay datos que demuestran que un turista consume cuatro veces más agua que un residente". "Este no es el modelo de presente ni de futuro, y no se puede culpabilizar a la ciudadanía y el campesinado", ha defendido Dani Cornellà.
Teresa Jordà afianza la necesidad de priorizar "el ahorro y la eficiencia en el uso del agua"
La consellera de Acció Climàtica, Teresa Jordà, ha destacado en sus respuestas la importancia de "desarrollar infraestructuras hídricas para tener un país más resiliente y preparado ante los cambios que vendrán" y ha insistido en que la actual situación acabará formando parte de la "nueva normalidad". "Trabajamos con el objetivo de garantizarnos el acceso a un recurso que es finito", ha subrayado Jordà. La titular del Departament d'Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural ha querido "negar la mayor" cuando se ha acusado al Govern de culpabilizar a los ciudadanos o el campesinado y ha rechazado las críticas sobre las sanciones a los municipios: "No tenemos la vocación de perseguir a nadie, el decreto ley es una caja de herramientas y contempla una medida disuasoria en caso de exceso de consumo, pero nosotros estamos al lado de los ayuntamientos".
Ante los reproches del PSC de falta de inversión —los socialistas han querido destacar que la ACA solo ejecutó el 20,8% de las inversiones previstas el año 2022—, Teresa Jordà ha defendido que el nuevo "ciclo de planificación" contempla inversiones para "doblar el volumen de agua de reutilización, mejorar las estaciones de tratamiento de agua potable, la ampliación de la desalinizadora del Prat o más dinero para el saneamiento de agua". Jordà ha explicado que la línea de acción también pasa por proteger "la biodiversidad, los bosques o los ecosistemas marinos".