La CUP acusa el Ayuntamiento de Barcelona de ejercer "coacción y vulneración del derecho a huelga". En concreto el grupo municipal cupaire ha denunciado que, al igual que se hizo antes de la huelga del 3-O y del 8-N, el director de relaciones laborales de Barcelona Activa envió un correo a las trabajadoras pidiendo información sobre la decisión de hacer huelga. "Este hecho se puede entender como una coacción a las trabajadoras y por lo tanto, una vulneración del derecho a huelga de las trabajadoras," reprochan.

Por esta razón, la concejala Eulàlia Reguant ha presentado una pregunta interrogando al consistorio sobre "qué medidas toma y tomará para próximas ocasiones el gobierno con el fin de garantizar que los directores de Relaciones Laborales de todas las empresas públicas no vulneran el derecho a huelga de las trabajadoras"?.