El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, advierte que lo juzgará un tribunal de excepción controlado directamente por PSOE y PP, los dos partidos mayoritarios del estado español, un tribunal que ha violentado sus propias normas para juzgar un caso que no le corresponde.

Hoy la defensa de Jordi Cuixart ha presentado el escrito de recusación como ya han hecho Junqueras y Romeva y como harán en las próximas horas el resto de presos políticos.

La defensa de Jordi Cuixart, también pide formalmente la recusación del magistrado Manuel Marchena y, por lo tanto, que se lo aparte del tribunal que presidirá el juicio. Las informaciones hechas públicas las últimas horas confirman, según la defensa, la politización del máximo órgano de los jueces. Marchena renuncia a presidir el Supremo pero presidirá la sala donde se celebrará el macrojuicio después de hacerse público que era el candidato del Partido Popular. Queda acreditado pues que estamos ante un juicio sin ninguna garantía y por eso Òmnium vuelve pedir el sobreseimiento de la causa y la libertad inmediata del presidente de la entidad y todo el resto de presos políticos. De hecho, una de las principales asociaciones de jueces, Jueces por la Democracia, ha pedido en las últimas horas aplazar el juicio por la crisis de confianza del Supremo.