El presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, que está encarcelado en Lledoners, ha denunciado en una entrevista con el diario alemán Taz, la connivencia que ve entre el ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, y la extrema derecha, con la que habría coincidido en una manifestación en Barcelona. Cuixart acusa a Borrell en la entrevista de "torpedear" todo intento de solución política al conflicto entre Catalunya y el Estado.
"El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, habló en las manifestaciones a favor de la unidad de España [después del referéndum del 1-O]. Allí también estaban fascistas presentes, con sus banderas. ¿Usted se imagina a un ministro del SPD hablando delante de banderas con la esvástica?", se pregunta Cuixart. El entrevistador, Reiner Wandler, evita responder.
El presidente de Òmnium compara la situación de España con la de Turquía, si bien con una intensidad menor. "Han violado nuestros derechos en el procedimiento de investigación judicial. ¿Por qué tiene que ser diferente ahora en el juicio? Lo que está pasando en España es -en menor escalera- lo mismo que pasa en Turquía. Están persiguiendo a 20.000 personas aquí con la denominada ley mordaza. Raperos por los textos, activistas de Twitter por noticias, titiriteros por obras de teatro... Hace unos días confiscaron los ordenadores y teléfonos móviles de periodistas de Mallorca que investigaban un caso de corrupción y que se negaron a revelar las fuentes. Las libertades en España han sufrido recortes graves", ha añadido.
Cuixart, que no descarta hacer huelga de hambre en el futuro, niega que su esfuerzo personal hasta ahora no haya valido la pena. "¿Usted preguntaría a Rosa Luxemburg, Václav Havel o Lech Walesa si fue positivo para ellos pasar por prisión?", pregunta. El presidente de Òmnium advierte a los partidos españoles por si intentan volver a aplicar un 155 e intervenir Catalunya, y apunta que eso sería "una catástrofe para todo el Estado español".