El corte en la Meridiana se ha convertido desde hace días en una arma arrojadiza del unionismo contra el independentismo y, especialmente, contra la conselleria de Interior. Después de casi 150 días de protesta, Ciudadanos ha decidido poner el foco contra el conseller Miquel Buch, a quien acusan de "permisividad" y de perjudicar a "miles de catalanes", y ya han adelantado que lo llevarán ante la fiscalía.

Así lo ha avanzado el diputado Matías Alonso en una interpelación al conseller en el Parlament, donde ha asegurado que están ultimando la denuncia y que próximamente será presentada ante la fiscalía del TSJC.

El diputado del partido naranja ha acusado al conseller de no proteger "los derechos de la mayoría de catalanes" y dar "carta blanca" a la ANC y a los organizadores de los cortes, que ha calificado de "grupúsculos separatistas" y de actuar "en ocasiones con fuerza". Ante este hecho, Alonso ha avisado al conseller de que su "permisividad" ante el corte "tendrá consecuencias".

Alonso también ha aprovechado el debate parlamentario para recordar que el conseller ya está siendo investigado "por malversación y prevaricación, por procurar un servicio de escolta a un prófugo de la justicia", en referencia al president Carles Puigdemont. "Le avisamos también entonces e hizo caso omiso. Asesórese mejor", le ha lanzado en este sentido.

Buch, por su parte, ha defendido que el derecho a manifestación está recogido en la Constitución y que su departamento está aplicando la jurisprudencia que hay en casos similares al ser garantista con el corte. "Menos amenazas y más escuchar lo que le digo", ha replicado, después de reprochar a Alonso que no escuche las argumentaciones jurídicas.