Los cuatro concejales de Ciudadanos (Cs) de Reus a los cuales la dirección del partido expedientó y suspendió de militancia han anunciado que piden la baja de la formación. Lo han hecho público después de que la Comisión de Garantías y Valores del partido haya desestimado todos los recursos presentados contra la resolución de la comisión de régimen disciplinario y todavía pendientes de una decisión definitiva de este organismo interno.

El todavía portavoz del grupo municipal, Juan Carlos Sánchez, ha acusado a la dirección de practicar una "caza de brujas" y ha puesto en duda la legalidad del procés disciplinario interno abierto contra él mismo, Pepa Labrador, Guillermo Figueras y Damián Morales, que tuvo como origen la presentación de una denuncia, delante de la Fiscalía por una supuesta irregularidad de un alto cargo del partido.

Sánchez, que tenía que encabezar la candidatura de la formación a las elecciones municipales, puesto por el cual fue ratificado el pasado febrero, acabó siendo apartado del puesto. Un hecho que atribuyó a la presentación de la denuncia a principios de este mes de marzo –y de la cual todavía no tienen ninguna respuesta de Fiscalía o del mismo partido.

Este martes ha anunciado solemnemente que él y los tres ediles que la formación tiene en Reus han pedido la baja de militancia. No han concretado el mecanismo pero la voluntad, ha precisado, es que sea lo antes posible.

"No queremos seguir en un partido donde se da poder a otras personas que acatan y silencian a los que molestan", ha asegurado Sánchez, que ha comparecido acompañado de Guillermo Figueras y Josefa Labrador. Creen que la formación opta por fichajes electorales "mediáticos y que digan amén a todo". Según ha adelantado, seguirán los dos meses que quedan de mandato municipal ocupante los cargos de concejales, "porque nuestros valores no han cambiado". Desconocen, todavía, si lo harán representando a Cs o como no adscritos. "El partido está inmerso en una deriva totalitaria y nos sabe mal que nuestro proyecto de ciudad esté en riesgo", ha declarado.

"Una aberración jurídica"

Consideran los concejales suspendidos que el procedimiento disciplinario interno que se ha abierto contra ellos es una "aberración jurídica" y un "despropósito total". Sospechan que la reunión de la Comisión de Garantías y Valores que les abrió el expediente se simuló porque nadie les ha facilitado el acta y su castigo se relaciona con "artículos que no corresponden".

Al fin y al cabo, sostienen, se debe a un "castigo" por la denuncia por irregularidades presentada contra el alto cargo de Cs. No descartan tampoco llevar el caso a los tribunales si se confirma que se ha producido falsedad documental en el procedimiento.

De cara a los comicios del próximo 25 de mayo, los cuatro concejales no descartan volver a presentarse bajo otras siglas. "No defraudaremos a nuestros electores. Nos han animado a volver a presentarnos. Otros partidos nos han contactado para acogernos con propuestas que hemos agradecido y, por supuesto, rechazado.

Es muy gratificante y sorprendente que otras formaciones nos han valorado más que la nuestra", ha avanzado|, precisando que no les faltan "pretendientes" para concurrir en diferentes listas, de partidos tanto nacionales como locales, así como muestras de apoyo de vecinos de la ciudad. La "fórmula", han anunciado, la harán efectiva una vez la resolución del expediente disciplinario sea firme.