La Crida ha querido dejar claro desde Waterloo que es un "agente político", con identidad propia, que tiene como objetivo "hacer efectivo el mandato del 1-O" y que serán los socios de la organización los que decidirán cuál será el futuro de la organización. Así lo ha asegurado el responsable de la cúpula de la Crida, Toni Morral, después de celebrar una reunión de la ejecutiva de la formación encabezada por el president en el exilio, Carles Puigdemont.

En pleno debate sobre la reorganización del espacio de JxCat, la formación que lidera el expresidente de la ANC encarcelado en Lledoners, Jordi Sánchez, ha querido dejar claro que "el futuro de la Crida lo decidirán sus socios" que serán los que fijarán qué tiene que hacer esta organización "a nivel estratégico y de toma de posición".

Con todo, Morral ha asegurado que el objetivo de la Crida es conseguir la unidad del independentismo, "desde la base" y a partir de la suma de diferentes sensibilidades.