La Comisión Europea presenta este miércoles a la Eurocámara su propuesta para un fondo de reconstrucción y para el presupuesto europeo para los próximos siete años con el objetivo de relanzar la economía después de la crisis del coronavirus.

Con tres semanas de retraso, el Ejecutivo europeo pondrá sobre la mesa una propuesta de fondo de 500.000 millones de euros con más ayudas que préstamos, en la línea de la propuesta de Alemania y Francia, según ha adelantado el actual representante de la Comisión a Austria y exsecretario general del ejecutivo europeo, Martin Selmayr. Italia y España también son favorables a las ayudas, que chocan con la oposición de Austria, Dinamarca, Países Bajos y Dinamarca, que continúan defendido los créditos.

Según ha adelantado Selmayr, la propuesta de Bruselas está en la línea de la propuesta francoalemana y plantea que sea la propia Comisión Europea la que emita deuda en el mercado para financiar la recuperación, así como la creación de nuevos recursos propios. Los recursos adquiridos con la emisión de deuda, avalada por el presupuesto, irán a parar a programas incluidos a las cuentas, que estarán en torno al billón de euros.

Aunque son pocos los detalles que la Comisión ha dejado ver del plan, su presidenta, Ursula von der Leyen, aseguró en una comparecencia en la Eurocámara que la propuesta incluye "inversiones públicas clave" e instrumentos para financiar "nuevas inversiones estratégicas" y para dar solvencia a empresas.

Pugna entre estados

Después de aprobar la movilización de medio billón de euros para mitigar en una primera fase los efectos económicos del coronavirus, ahora la propuesta de que la Comisión Europea pone este miércoles sobre la mesa da el pistoletazo de salida a la discusión entre los líderes europeos para decidir como financiar la recuperación económica de una crisis que afecta a todos los estados pero no en la misma medida.

Las posiciones están hoy por hoy alejadas sobre la proporción de ayudas y de préstamos que tiene que incluir el plan, con el sur defendiendo las subvenciones y el norte los préstamos. Esta cuestión anticipa una fuerte pugna entre los estados para financiar una crisis que amenaza con fragmentar el mercado único.

Un plan basado en 3 pilares

Delante de los eurodiputados, Von der Leyen dijo que el plan está basado en tres pilares, uno de los cuales concentra la mayor parte de los recursos y está centrado al ayudar en los Estados a recuperarse de la crisis. Según adelantó Von der Leyen, algunas de las inversiones estarán ya disponibles este mismo año.

En varias intervenciones, eurocomisarios han asegurado que la propuesta incluye una parte "sustancial de ayudas", que dará apoyo a los sectores más afectados por la crisis, como por ejemplo el turismo, y que incluirá una "garantía infantil" y "fuertes medidas" contra el paro juvenil, entre otros.

¿Qué incluye la propuesta francoalemana?

La propuesta avanzada por Selmayr está en la línea del acuerdo anunciado entre Francia y Alemania justo una semana antes de que la Comisión presente su propuesta. En una comparecencia conjunta, la canciller Angela Merkel y el presidente Emmanuel Macron salieron al paso ante el bloqueo con una propuesta que aleja Alemania de su tradicional ortodoxia económica.

La propuesta francoalemana pone sobre la mesa un fondo de 500.000 millones de euros en ayudas y financiado con la emisión de deuda por parte de la Comisión a través del presupuesto europeo. Los nórdicos, sin embargo, se oponen a esta propuesta con ayudas y emisión de deuda europea.

Otra de las cuestiones clave es si los recursos irán acompañados de reformas. El acuerdo francoalemán dice que "el apoyo para la recuperación" estará "basado en un claro compromiso de los estados miembros a seguir una política económica saneada y una ambiciosa agenda de reformas".

En este sentido, la Comisión Europea ha dicho hasta ahora que su propuesta para crear un plan de recuperación quiere "mantener un vínculo" entre "inversiones y reformas". Así, el dinero destinado a los estados podría estar acondicionado a algunas "reformas" que estén en la línea de las recomendaciones económicas hechas por la Comisión a los Estados.