JxCat contempla votar a favor del decreto de confinamiento aprobado este fin de semana por el gobierno de Pedro Sánchez para parar la expansión del coronavirus. Así lo ha apuntado el portavoz del PDeCAT, Marc Castells, a pesar de subrayar que el grupo parlamentario todavía no ha tomado una decisión al respeto.

"Siempre hemos mostrado una actitud propositiva, si son las medidas que hemos reclamado desde el gobierno de nuestro país, aunque lleguen tarde tendremos que dar cierta cobertura", ha admitido Castells en una rueda de prensa por videoconferencia después de la reunión de la dirección del partido y donde ha recordado que en los anteriores decretos de prórroga y medidas subsiguientes votaron abstención y a favor.

El portavoz del PDeCAT ha evitado entrar en la polémica provocada por el tuit de la cuenta de Twitter de ERC en que atribuye a sus conselleries la adquisición de material sanitario. Se ha limitado a puntualizar que el trabajo del Govern es colegiado de todas las conselleries y no de uno u otro partido. "Entendemos que este tuit se desacredita por sí solo. Es desafortunado y no entraremos más"

Donde sí ha entrado es a la respuesta que suscitó este tuit por parte de la esposa de Jordi Turull, Blanca Bragulat, que exigió a la conselleria de Justicia que asuma las recomendaciones de la ONU sobre el confinamiento domiciliario de los presos. Castells ha apuntado que también el PDeCAT ha trasladado esta reclamación al departamento de Ester Capella.

"Lo que hemos dicho y lo hemos dicho donde lo teníamos que decir es que queremos que los presos salgan de las prisiones y que puedan ir a casa. El tercer grado es la medida en que tendrían que estar", ha retret.

El portavoz del PDeCAT ha asegurado que la dirección del partido en su reunión de hoy ha abordado sólo cuestiones relacionadas con el coronavirus; que el proceso de confluencia con JxCat ha quedado aparcado desde el 12 de marzo, cuando se hizo la última reunión; y que será el president de la Generalitat, Quim Torra, quien tendrá que decir si mantiene la voluntad de avanzar o no las elecciones, tal como había anunciado, ante la situación de crisis provocada por el coronavirus.