El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, no descarta la utilización de datos de geolocalización de los teléfonos móviles de la población para controlar la propagación del coronavirus. Durante una rueda de prensa, Campo ha dicho que es una de las medidas que están "estudiando" pero ha insistido en que todo se tiene que hacer siempre "de manera respetuosa con el ordenamiento jurídico".

Campo ha admitido que les consta que hay otros países que donde se está aplicando. "La Agencia de Protección de datos nos dice que no hay vulneración cuando se trata de una situación como esta y nos parece razonable que cuando alguien es positivo y es reticente establezcamos algún mecanismo", ha asegurado.

Campo también se ha referido a la posibilidad de obligar en aquellos positivos que no quieran aislarse. "El estado de alarma no rebaja el estado de derecho y, en supuestos como este, pedirían los informes pertinentes para actuar", ha dicho en relación a la habilitación de equipamientos públicos y hoteles para aislar asintomáticos.

En cualquier caso, ha dicho, no se puede homogeneizar todo" y el Gobierno contempla entre los supuestos a personas que quieran acceder a estos espacios "voluntariamente".

 

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