La gestión del gobernador de California, Gavin Newsom, para hacer frente a la pandemia del coronavirus está siendo más aplaudida que la del presidente Donald Trump. Según una encuesta de la Universidad de Monmouth, Newsom recibe la aprobación del 74% de su población, por encima del 50% de Trump.

Las medidas que quiere tomar a la costa oeste y que ya ha anunciado que ampliará son más estrictas con el confinamiento total. Una de ellas para poder llevar a cabo su plan de choque es considerar California como un estado nación.

Desde la revista económica Bloomberg ya se hacen eco de esta idea y de cómo puede afectar a la economía. En declaraciones en el canal televisivo MSMBC, el gobernador anunció que adquirirá los suministros hospitalarios que el gobierno federal ha sido "incapaz de proporcionar" y "exportará hacia otros estados que lo necesitan" ahora mismo.

De entrada, quiere combatir la crisis alimentaria que se deriva y también repartirá 200 millones de mascarillas a través del tejido social que tiene un poder adquisitivo superior y al que, ahora mismo, se lo puede reclamar más esfuerzos.

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Por todo ello, también ha sacado del cajón una idea que ya defendió cuando tomó cargo el año pasado: reorientar la relación de California con la capital de los Estados Unidos, Washington. Actualmente, esta región representa el 15% de todas las contribuciones individuales al Tesoro del país y Newsom considera que "el gobierno federal ya no es un socio fiable en la prestación de atención sanitaria, dar apoyo a los inmigrantes, las personas LGBTI y al proteger el medio ambiente". Y pide: "Forjar nuestro propio camino".

Muchos analistas, colocan esta pandemia como una batalla electoral para el 2024 y Newson, del Partido Demócrata, podría tener un papel importante.