Bibliotecas, piscinas, polideportivos, teatros, ludotecas, centros cívicos, gimnasios, ateneos, casales de barrio, escuelas municipales... A partir de este sábado, todos los equipamientos municipales de Barcelona que no presten servicios esenciales para la ciudadanía quedarán cerrados al público. No volverán a abrir, por lo menos, hasta después de Semana Santa.

Lo ha anunciado este mediodía la concejala de Salut, Gemma Tarafa, que a diferencia de ayer, ha comparecido sin Ada Colau, que se encuentra confinada por prevención a raíz de nuevos positivos por coronavirus en el Ayuntamiento. "Damos un paso más para allanar la curva de contagios", ha explicado. El objetivo prioritario es evitar la propagación del Covid-19.

La lista de espacios públicos afectados es larga. Incluye tanto el ámbito deportivo como el educativo y el de la cultura y el ocio. Básicamente los únicos centros que no cerrarán son los CAP y los dedicados a servicios sociales y curas.

El cierre estará vigente, por ahora, hasta el 13 de abril.