Los grupos del Congreso debatirán este martes si citan al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al exministro del Interior socialista Alfredo Pérez Rubalcaba y a excomisarios de la Policía como José Villarejo y Eugenio Pino en la comisión de investigación sobre el supuesto uso partidista del Ministerio del Interior en la etapa de Jorge Fernández Díaz.

El presidente del citado órgano, el peneuvista Mikel Legarda, ha convocado a los comisionados a una reunión en la que se discutirá el listado de comparecientes que cada grupo ha diseñado para que desfilen por esa comisión, tras obtener la documentación que reclamaron para afrontar el trabajo de la comisión de las próximas semanas.

Inicialmente tanto populares como socialistas compartían la idea de frenar las pretensiones de Unidos Podemos, Esquerra Republicana (ERC) y el PDeCAT de llamar a declarar a los excomisarios que acompañaron a Fernández Díaz en su etapa como ministro, entre ellos José Villarejo y Eugenio Pino.

Alegaban que la comisión de investigación no puede convertirse en un "circo" y, de hecho, pensaban hacer valer sus votos -en esa comisión rige el voto ponderado- para echar por tierra la voluntad de Unidos Podemos y de los independentistas catalanes de usar el Congreso como altavoz de los comisarios, varios de ellos implicados en investigaciones judiciales abiertas.

Sin embargo, después de que Fernández Díaz y De Alfonso negaran en sede parlamentaria haber pedido la reunión de la grabación y apuntaran a la cúpula policial, los socialistas tenían dudas de si debían facilitar o no las explicaciones en el Congreso de los agentes vinculados con la llamada "policía política".

En concreto, además de a los excomisarios policiales, Unidos Podemos, ERC y PDeCAT quieren citar al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al actual ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido. Los de Pablo Iglesias, por su parte, reclamaron hace unos días también la comparecencia del exministro socialista Alfredo Pérez Rubalcaba para que explique si los trabajos para hostigar a los adversarios políticos se iniciaron bajo su mandato.

Es previsible que la petición de cuentas a Rubalcaba no salga adelante porque, según las fuentes consultadas, el PP, de entrada, no tiene intención de apoyar esa petición del grupo confederal, con la que, según apuntan, Unidos Podemos sólo busca "hacer ruido" y generar "confrontación". Ello podría provocar que los socialistas, por su parte, no aceptaran las explicaciones de Rajoy en el Congreso.