En un acto en el que a cada proclama se han sentido los golpes y gritos desde dentro de la prisión como respuesta, se ha pedido de nuevo la libertad de los presos políticos y que el Parlament no ceda a las demandas de Llarena para que les retiren el acta de diputados.
"La reivindicación permanente muestra la determinación de un pueblo que lucha por sus propios derechos", ha dicho Laura Masvidal abriendo el manifiesto que ha leído conjuntamente con las mujeres de Jordi Turull y Josep Rull. "El acercamiento no es ningún privilegio, no es nuestro objetivo. Los queremos en casa, no cerca de casa", han proclamado en nombre de todas a las familias de presos y exiliados.
Marcel Mauri, de Òmnium Cultural, ha denunciado que "las estructuras del Estado siguen aplicando de forma implacable la suspensión de la democracia". "Al gobierno del PSOE le tenemos que decir que ya no puede mirar hacia otro lado, el único gesto que nos vale es la liberación de los presos y el retorno de los exiliados. El gobierno español puede acabar con la represión si lo quiere".
La mujer del tiempo Míriam Santamaria ha presentado el acto con un manifiesto pidiendo "libertad inmediata" y dejando claro que "el acercamiento no es ningún gesto político, sino una obligación legal".
"No nos detendremos hasta conseguir la libertad de los presos y el retorno de los exiliados", ha acabado el manifiesto dando voz a todos los partidos políticos.
"Estos muros aprisionan ideas", ha dicho Eduard Pujol, de Junts per Catalunya. "La libertad es un helado en la plaza, un café en la Fonda Europa de Granollers y las habaneras de Calella", ha rubricado el portavoz parlamentario.
El diputado y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario de Esquerra Republicana en el Parlament, Gerard Gómez del Moral, ha gritado: "No pararemos hasta que sean libres". El estado español ha intentado suspender la democracia", ha dicho Gerard Gómez y ha recordado la proclama de Oriol Junqueras: "Hasta la victoria siempre".
Maria Sirvent de la CUP ha pedido "la liberación social y nacional de nuestro pueblo".
La única consellera hoy presente en la concentración ha sido la de Salud, Alba Vergés.
El acto de hoy ha sido diferente, frente al caos que se originó la semana pasada. Se ha hecho en unos campos segados de detrás de la prisión, en la colina de Torres de Bages. El acceso a Lledoners, completamente cerrado, para que el vicepresident, Pere Aragonès, y el conseller de Interior, Miquel Buch, pudieran entrar sin grandes estridencias y, en el caso de Buch, poder hacer el traspaso con Joaquim Forn, a quien sucede en la conselleria.
A la concentración han asistido del PDeCAT, la coordinadora general, Marta Pascal; el coordinador organizativo, David Bonvehí; y la portavoz, Maria Senserrich. También irán otros miembros de la ejecutiva. Por parte de ERC, el diputado y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario de Esquerra Republicana en el Parlament, Gerard Gómez del Moral; la diputada y secretaria cuarta de la Mesa del Parlament, Adriana Delgado; los diputados, Francesc Viaplana y Titón Laïlla; y el senador Xavi Castellana. Y de la CUP ha venido la diputada Maria Sirvent.