La aplicación del artículo 155 en Catalunya llegó tarde para muchos españoles, que reclaman más mano dura.

Esto se puede entender de la última encuesta de GAD3 para el diario ABC, que impulsa a Ciudadanos y a sus líderes.

La muestra apunta a que en caso de elecciones españolas se podría producir el cambio mayor desde 1982, cuando PSOE y Alianza Popular -la antigua marca del PP- acabaron con la UCD.

Según la encuesta, Ciudadanos sería el partido más votado con el 26,2% de los votos, por delante del PP (24,7%) y el PSOE (24,2%). No sería primera fuerza en escaños a causa de la ley electoral -de la que tanto se han quejado después del 21-D- y que premiaría a populares y socialistas por el apoyo que todavía recibirían en las provincias menos pobladas.

Así, en escaños se seguiría imponiendo el PP con entre 97 y 101 diputados (ahora tiene 133), seguido del PSOE con 93-97 (ahora 84), Ciudadanos con entre 86 y 90 (ahora 32) y finalmente Unidos Podemos, que caería hasta entre 42 y 44 diputados (tiene 67).

Después de los grandes partidos españoles se encontraría ERC con 10-11 escaños (ahora 9) y el PDeCAT con 6 (8).

La subida de Cs también se traduce en la valoración de los líderes por la cuestión catalana. El más valorado es el rey Felipe VI (6 puntos sobre 10), seguido de Inés Arrimadas (5,7) y Albert Rivera (5,4). Destaca que la líder de Cs en Catalunya supera al presidente del partido en ámbito estatal.

De su lado, el peor valorado es Pablo Iglesias (2,5), el único de los líderes españoles que ha apostado por el referéndum sobre la independencia.

'El País' también apunta a la derrota del PP

El partido de Mariano Rajoy no sólo recibe por parte del ABC, sino que también de El País.

Según publica hoy el citado diario, sólo el 54% de los votantes populares en 2016 apostarían ahora por el partido.

El beneficiado de esto sería Albert Rivera, del que el 68% de votantes del PP cree que tiene un proyecto de futuro "adecuado para España". Esta cifra baja 10 puntos hasta el 58% en el caso de Rajoy.

Las elecciones del 21-D pasan todavía más factura al PP, que ha perdido 14 puntos en fidelidad de voto sólo desde el pasado noviembre.