Cristina Cifuentes, además de ser la presidenta de la Comunidad de Madrid, es la nueva gestora del PP madrileño. Lo es desde que Esperanza Aguirre dimitió del cargo de presidenta el domingo pasado, por las acusaciones de financiación irregular del partido. Hoy Cifuentes ha querido defender a su predecesora, y ha asegurado que Aguirre podría haber cometido “muchos errores”, pero que no cree que se le pueda atribuir haber estado “inmersa en la corrupción”.

Lo ha hecho en una entrevista a RNE, donde ha asegurado que la “dilatadísima” carrera política de Aguirre ha tenido “muchas luces y algunas sombras” pero no de corrupción. Cifuentes ha remarcado que “tienen que ser los jueces los que determinen si una persona ha cometido corrupción o no”, porque si no, fallan unas “garantías mínimas” y se entraría en una situación de indefensión.

No ha querido marcar el camino a Rajoy

Cifuentes también ha querido dejar claro que respeta la decisión de Aguirre de marcharse, así como la de quedarse en el Ayuntamiento. Para la dirigente madrileña esta es una decisión “personal” de la propia Aguirre y ha remarcado que ya ha dado “sus explicaciones”.

 

Lo que sí que ha querido desvincular es su partida con una presión hacia Rajoy, tal como se ha dicho en varios medios estos días, y dice que entiende que esta “no era sin duda su intención”. Cifuentes también ha asegurado que Rajoy es un “gran presidente” y un “gran candidato”, pero no ha querido entrar a especular sobre acontecimientos futuros.