Madrid respira clima preelectoral a dos semanas de la disolución de las Cortes y la previsible convocatoria de nuevas elecciones para el 26 de junio. También entre los partidos catalanes. El proceso de independencia de Catalunya ha puesto en la agenda española el referéndum: En Comú Podem (ECP), ERC y Democràcia i Llibertat lo defienden. La negativa de Podemos a pactar con el PSOE, si éste no le garantiza el derecho a decidir ha dificultado la conformación de gobierno en el Estado, de modo que ha reaparecido entre las fuerzas independentistas el dilema sobre si reeditar la lista Junts per Sí, ahora en formato Junts per Madrid.

Hace unas semanas, el líder de DiL, Francesc Homs, propuso abiertamente a los republicanos catalanes unirse para generar dicha confluencia. Los argumentos de Homs fueron que encontraba “muy difícil, por no decir imposible” que el Estado aceptara un referéndum pactado con el Estado, y hacían un llamamiento a unir sus esfuerzos para hacer mayor presión sobre el Congreso. Era el mismo argumento a que los representantes de Convergencia habían apelado el 27 de septiembre, durante las elecciones catalanas, para generar la propuesta Junts pel Sí, con la voluntad de dar un mensaje claro en el mundo con su compromiso con la independencia. Ahora el objetivo pasaba por superar ECP, que defiende el derecho a decidir, aunque no la independencia.

Sin embargo, la situación de CDC actualmente es diferente. Se habían oído voces que su proceso de refundación podría conllevar dificultades para el partido a la hora de enfrentar unos nuevos comicios, motivo por el que algunos esperaban que se hubieran abstenido para que gobernara el PSOE y poder regenerarse pausadamente. El expresident Artur Mas explicó a El Nacional que el debate entorno a cómo tendría que ser el nuevo partido estaba abierto y cada uno tendría que dar su opinión. Además de este reto para el partido, los sondeos parecen apuntar una tendencia a la baja para DiL, dejando la puerta abierta a especulaciones entorno al beneficio que obtendrían de unirse a los republicanos, si se presentaran conjuntamente con ellos.

Así las cosas, la idea de que se quisiera priorizar los intereses de CDC perdió bastante cuando Homs y el líder de ERC, Joan Tardà, acordaron que votarían conjuntamente a la investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez. Su No se mantendría, a no ser que se les ofreciera el referéndum a cambio. Para respetar la unidad de voto alegaban que su compromiso era “con el mandato de las urnas del 27S” y “el gobierno de la Generalitat”. Las afirmaciones llevaron a Sánchez a decir, en tono burlesco hacia Homs, que “no sabía cuándo se había convertido en el representante de la izquierda en Catalunya”.

ERC, “veremos”

Cuando en Semana Santa Homs propuso esta unión a los republicanos, Tardà contestó que quizás. “Este debate ni se ha abierto", dijo el dirigente de ERC. "Si hubiera nuevas elecciones, que creemos que no habrá, discutiríamos de eso, pero ni siquiera hemos dedicado cinco minutos a debatir sobre esta cuestión", afirmó Tardà entre los pasillos del Congreso. También evitó posicionarse al respecto Gabriel Rufián, su número dos.

Los republicanos y los convergentes sólo están separados por un diputado. ERC tiene 9, y DiL 8, sumando 17, frente los 12 de En Comú Podem. No se conoce el apoyo que obtendrían los podemitas catalanes, aunque las encuestas auguran un crecimiento electoral si se presentasen conjuntamente. El riesgo se podría ver minimizado para ERCDiL si formaran parte de la misma lista, ya que el sistema electoral no los penalizaría, como sí lo hace la Ley de Hondt cuando se presentan muchos partidos por separado.

Por el lado de ERC, los sondeos les auguran un crecimiento electoral, como también lo habían augurado antes de los comicios del 27S en Catalunya. Parece que entonces la cúpula de Oriol Junqueras podría haber sido reticente a la lista única.

El hecho es que ni Tardà ni Homs se han sentado aún para abordar el tema, y si la situación de bloqueo en España continúa como hasta el momento, con mucha probabilidad habrá nuevas elecciones el 26J. Será entonces cuando se tengan que sentar y decidir si la lista Junts per Madrid se impulsa, para tratar de superar a los comunes en escaños y presentar, a su parecer, un mandato más numeroso “sobre la voluntad del pueblo de Catalunya”.