Nuevo episodio de catalanofobia, esta vez en las Illes Balears, concretamente en Mallorca. El episodio se ha hecho público gracias a un vídeo que circula por Twitter en el cual se puede ver a una chica envuelta con una estelada recibiendo un abucheo de un grupo de jóvenes que se baña en la piscina de un hotel. Según los comentarios, se trataría de un grupo de estudiantes que está de viaje de final de curso en un hotel de Mallorca, algunos, incluso, aseguran que se trata de un grupo de jóvenes de Murcia. Según Dbalears.cat (un diario en catalán de las Illes), los hechos han sucedido en la piscina del hotel Sun Club El Dorado de Tolleric, en Llucmajor.

El auge de la extrema derecha en las Balears

El PP y Vox han alcanzado un acuerdo para la investidura de Marga Prohens que abre la puerta a la abstención de la ultraderecha para confirmar un gobierno del PP sin Vox. A cambio, el PP ha situado como presidente del Parlamento balear al vicesecretario jurídico de Vox Gabriel Le Senne, un abogado ultracatólico que se ha pronunciado en contra de las vacunas de la covid, niega la existencia de la violencia machista, ha criticado al colectivo LGTBI, rechaza la existencia del cambio climático y es un firme detractor del aborto y la eutanasia. El PP y Vox también han firmado un acuerdo de contenidos donde hablan de "violencia intrafamiliar" y no de violencia machista y prometen que pondrán punto final a lo que denominan "imposición lingüística" del catalán en las Balears.

Ultraconservador, Le Senne también ha publicado mensajes contrarios a la ley de la eutanasia, aprobada esta legislatura en el Congreso, y al aborto. "Matar a una rata estará sancionado; deshacerse de un embrión de 14 semanas será gratis. Todo muy coherente", escribía después de que se aprobara la ley de bienestar animal. O: "¿Cómo ayudamos a los enfermos terminales? ¿Les garantizamos curas paliativas? No, les decimos: si quieres, te matamos. ¿Cómo ayudamos a las mujeres embarazadas? ¿Les damos apoyo para ser madres? No, les decimos: si quieres, matamos a tu hija".

Algunos de los puntos esenciales del preacuerdo entre PP y Vox son acabar con las políticas y normativas "que promueven el enfrentamiento y la división, o que ataquen la unidad de la nación" y con "la imposición lingüística" del catalán. Con respecto al ámbito de la educación, Vox reclamaba que se garantizara el derecho a estudiar en castellano en cualquier etapa, pero se está pactando para que la elección se asegure solo en los primeros años de la enseñanza. También abogan por una escuela "libre de adoctrinamiento ideológico".