Pablo Casado no se mueve de su petición a Pedro Sánchez: que se levante de la mesa de diálogo bilateral entre el Estado y la Generalitat. Este viernes, lo ha hecho con un argumento nuevo: el procesamiento de Josep Maria Jové, miembro de la delegación catalana, por parte del TSJC por los delitos de malversación, prevaricación y desobediencia. El presidente estatal del PP se ha preguntado "hasta donde llegará el escarnio" de ver al presidente español sentado con "un inhabilidad y un procesado".

En un acto de precampaña en Ermua (Vizcaya), el dirigente conservador ha denunciado que "uno de los negociadores de la mesa de autodeterminación que convocó Pedro Sánchez ha sido procesado por cuatro graves delitos por organizar por el golpe al Estado el 1 de octubre". Es por este hecho que se ha preguntado "hasta dónde va a llevar Pedro Sánchez la subasta por unos votos a sus presupuestos generales del Estado para mantenerse en el poder unos meses o unos años más".

Por todo eso, Casado ha considerado que es "inasumible" y ha deseado que Sánchez "se levante de una vez por todas de esta mesa y vuelva a la centralidad, al constitucionalismo". Si lo hace, ha concluido, "allí nos encontraremos".