El líder del PP, Pablo Casado, ha transmitido este martes al secretario general del PSOE y candidato a la investidura, Pedro Sánchez, que el PP "no dará apoyo a su investidura ni se abstendrá en una segunda votación", porque cree que los españoles le han encargado "liderar España desde la oposición".

Lo ha emplazado a hacer real el "gobierno de cooperación con Podemos" que ve como una opción "lógica" después del acuerdo con los presupuestos y la moción de censura, y que tendría que completar, ha dicho, "no con los independentistas" sino con acuerdos con "partidos regionalistas" como UPN y Coalición Canaria, que podrían acondicionar, su apoyo o una abstención a acuerdos para gobernar Navarra o Canarias. Las abstenciones de CC y UPN podrían acercar Sánchez a una investidura sin apoyo de las fuerzas independentistas si Sánchez sumara las formaciones que dieron apoyo a la presidencia de Meritxell Batet en el Congreso.

Casado ha hecho estas manifestaciones después de reunirse al Congreso con Sánchez en el marco de la ronda de contactos para la investidura. El líder del PP ha afirmado que Sánchez no le ha explicado en qué consiste el gobierno de "cooperación" que el PSOE y Podemos han pactado impulsar.

El líder del PP adelantado que su formación hará una oposición "sujeta" y ha recordado que Sánchez se opuso frontalmente a abstenerse a la investidura de Mariano Rajoy. La diferencia con la situación actual, ha afirmado Casado, es que entonces no había alternativa y ahora –en dedo- Sánchez si que puede sumar con "Podemos y los regionalistas".

Según ha explicado, los dos han hablado de la situación a Catalunya y Casado ha "extendido la mano" a "pactos de estado" para garantizar -ha dicho- la "convivencia", como por ejemplo aplicar el 155 u otros mecanismos legislativos como la alta inspección educativa, la Ley de seguridad ciudadana, la Ley de estabilidad presupuestaria y las leyes de contenido audiovisual. Todo para que "se cumplan las mínimas normas en un estado constitucional como el nuestro".