Hiperactividad epistolar estos días en la política catalana. Este domingo por la tarde ha sido Miquel Iceta quien ha enviado una carta al president de la Generalitat. El escrito rezuma un tono especialmente contundente y exige a Torra que "condene expresamente" las acciones violentas y que cierre filas con el cuerpo de Mossos d'Esquadra, la Policía Nacional y la Guardia Civil. Asimismo, aprovecha para afirmar que la actuación policial de estos días ha sido proporcionada.

El primer secretario del PSC avisa al president que "precisamente porque en varias ocasiones se ha caracterizado por dar apoyo en los sectores más radicales del independentismo, está especialmente obligado a marcar una línea clara que separe las legítimas y pacíficas formas de discrepancia, de cualquier actitud incívica y violenta". Iceta considera insuficiente que Torra se limite a decir que dichas actitudes no le representan y subraya la necesidad de que "condene expresamente y lo repita tantas veces como haga falta, hasta que cesen los disturbios violentos que estropean la imagen cívica" de Catalunya.

Pero no sólo eso. El líder de los socialistas catalanes recoge en su misiva (sólo) el número de agentes heridos estos días -153 mossos, 134 policías nacionales y un guardia urbano. Según su opinión, esta "relación de heridos desacredita las acusaciones genéricas de falta de proporcionalidad de la actuación policial y pone de manifiesto la imperiosa necesidad de mostrar el apoyo total del gobierno a los diversos cuerpos policiales que han actuado de forma bien coordinada".

Para acabar, Iceta reprocha al jefe del ejecutivo catalán haber conocido "a través de los medios su petición de entrevista con el presidente del gobierno de España para reanudar el diálogo político". Sobre esta solicitud, le niega la autoridad para "hablar en nombre del conjunto del país". Antes de que "se produzcan estas conversaciones", le dice Iceta, es "imprescindible que Usted mantenga reuniones con los presidentes de los grupos políticos presentes en el Parlament de Catalunya o reanude el trabajo del Espacio de Diálogo, presidido por Usted e integrado por los presidentes de los grupos parlamentarios".

Y fiel al estilo Iceta, remata la carta con un varapalo marca de la casa. "Querríamos evitar que se reprodujera el penoso episodio de la última sesión parlamentaria en la que Usted formuló una propuesta política que ni siquiera había compartido con las fuerzas políticas que forman parte del gobierno que Usted preside".