El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha concedido una entrevista a la BBC, donde asegura que con su ida en Bruselas ha servido para "transformar la crisis catalana en un tema internacional, y sobre todo, europeo", y ha recordado que "obviamente" echa de menos "la familia y el país", pero que no se marchó "para vivir confortablemente" ni para "desaparecer del escenario", sino para internacionalizarlo.

Asimismo, Puigdemont ha planteado que vive en una "paradoja", ya que él es "un hombre libre en la Unión Europea" mientras otros miembros de su Gobierno "están siendo juzgados" y ha recordado que aunque el Parlament "declaró la independencia en el ejercicio de sus facultades", era el Govern "el encargado de ejecutarlo, lo que no se hizo".

Además, el presidente ha señalado que tiene sospechas que está siendo espiado en Bélgica y ha señalado que han encontrado "dos dispositivos electrónicos" en sus coches, un asunto que está siendo investigado por la justicia belga.