El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha confiado encontrar una "solución práctica" con el Ayuntamiento de Barcelona que "permita que se pueda votar como en el resto del país". En una entrevista en El Punt TV, Puigdemont ha rechazado las lecturas que se han hecho sobre la postura de la alcaldesa Ada Colau y que aseguran que no se podrá votar en los locales habituales en la capital catalana. El presidente ha explicado que hay dirigentes dentro de Barcelona en Comú que quieren votar, "y algunos de ellos votar SÍ", y por eso ha afirmado que ve "difícil" que toda esta "voluntad" no desemboque en una solución.

El presidente ha dicho que aquellos alcaldes que no permitan que se vote en los lugares habituales tendrán que explicar el porqué, pero ha garantizado que todo el mundo podrá ejercer el voto el 1-O porque hay "alternativas". "Si un ayuntamiento no puede ponerse al lado de la solución pero acepta no ser parte del problema, hay margen para trabajar", ha declarado.

El presidente ha dicho que el deber del Govern es "garantizar a los ciudadanos que tendrán posibilidades de ir a votar al margen de donde vivan". Ha añadido que si se puede hacer de acuerdo con los ayuntamientos "mejor", pero que si no se así se hará de "otra manera". "Siempre hay alternativas", ha apuntado.