No tienen fecha, pero las elecciones catalanas están más cerca que lejos, y los partidos lo saben bien. Por este motivo, se encargan de posicionar y promocionar a sus próximos candidatos a la Generalitat. Es, de hecho, de lo que más está sirviendo la repetición electoral al Congreso, en una campaña en qué discursos y los relatos no han variado demasiado, aunque ya hace seis meses desde la última cita en las urnas.
Uno de los partidos que más está siguiendo esta estrategia es ERC, con un Pere Aragonès claramente en auge y que cada vez tiene más protagonismo, pero también Ciudadanos, que utiliza el espacio que los ofrece la campaña para hacer más conocida a su candidata a Catalunya, Lorena Roldán.
Los republicanos todavía no han decidido formalmente quién será el cabeza de cartel a la Generalitat, ahora que Oriol Junqueras está inhabilitado por cualquier cargo público, pero Aragonés, que desde el mes de septiembre es coordinador nacional del partido, tiene un buscado papel principal durante la campaña. Fue hasta el encargado de cerrar el acto de apertura de campaña del jueves pasado, por delante de Gabriel Rufián, candidato a las elecciones generales. Además, practicamente siempre es él el encargado de dar el titular principal.
También el presidente del Parlament, Roger Torrent, que se ha posicionado internamente como posible candidato, tiene un papel destacado en la campaña. Como ya pasó en las elecciones del 28-A, Aragonés y Torrent se parten los actos por el territorio catalán y actúan los dos en los mítines importantes.
Sergi Alcàzar
Sin embargo, en aquella ocasión el presidente del partido, y entonces también cabeza de lista a Madrid a pesar del encarcelamiento, Oriol Junqueras, participaba en los actos a través de las videoconferencias que le autorizaba la JEC y con cartas. También la secretaria general del partido, Marta Rovira, intervino en algunos mítines desde el exilio en Ginebra. Ninguno de los dos está esta vez. Junqueras por la situación de preso e inhabilitación y Rovira en vistes de una posible orden de detención del Tribunal Supremo a las autoridades suizas.
Una situación que deja a Aragonés el papel de hombre fuerte del partido y que lo prepara para el próximo terreno de juego: las elecciones en el Parlament.
Cs lucha para dar a conocer Roldán
Quién sí que tiene decidido formalmente el futuro candidato a la Generalitat es Ciudadanos, la militancia del cual ya ha señalado Lorena Roldán. Sin embargo, la actual líder del partido, después de la marcha de Inés Arrimadas al Congreso, no es demasiado conocida para el gran público. Por eso, los naranjas han optado por darle un papel principal durante la campaña, a diferencia del 28-A donde Carlos Carrizosa y segundas filas de la lista electoral tenían más protagonismo en ausencia de la candidata Arrimadas, que iba a buscar votos por las españas.
La promoción de Roldán no es nueva. De hecho, empezó con la moción de censura contra el presidente Quim Torra que se celebró a principios de octubre, pero en esta campaña ha sido más explícita y exponencial. La futura candidata a la Generalitat está protagonizando los de actos de mediodía, normalmente encabezados por los candidatos, y tiene también un papel destacado en los grandes mítines, como los que se celebraron el pasado fin de semana en Tarragona y l'Hospitalet.
EFE
El otro líder que ya es seguro de que se presentará a la Generalitat es el socialista Miquel Iceta. En su caso, el liderazgo está más que consolidado, pero también está teniendo un papel protagonista en esta campaña como hombre clave del partido. También, en parte, por la baja médica de la candidata, Meritxell Batet, que ha estado ausente desde el inicio.
El resto de candidatos, una incógnita
El resto de partidos –desde JxCat y los comunes hasta la CUP o el PP– todavía no tienen decidido su candidato a las elecciones catalanas. Eso sí, dentro del ámbito de junts el papel central de la campaña, más allá de la candidata Laura Borràs, lo juega el presidente Carles Puigdemont como líder del espacio, mientras que por parte de los comunes, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, está teniendo un papel central en los mítines.
Por otra parte, la CUP no promociona ningún nombre más allá de los liderazgos actual y de los cabezas de lista para las elecciones en el Congreso, con Mireia Vehí al frente, pero sí que utilizan el escenario electoral español como antesala de las catalanas. Nunca antes los cupaires se habían presentado a unas elecciones generales al no reconocerlas como propias. Este 10-N sí que lo harán, con la situación de la política actual como pretexto. A nadie se le escapa, sin embargo, que la candidatura no quiere dejar pasar la oportunidad de tener más notoriedad con la vista puesta a mejorar a los 4 diputados que tiene ahora en el Parlament. La no concurrencia a las últimas elecciones le habían hecho perder comba.
Finalmente, los populares continúan inmersos en una crisis interna, que tuvo como exponente el momento en que la candidata, Cayetana Álvarez de Toledo, consideró que el partido tenía que pedir "perdón" a los catalanes no independentistas por haberles dejado "desamparados". Unas declaraciones que no gustaron al anterior candidato y exlíder del partido, Xavier García Albiol. El próximo candidato, dentro de un partido dividido, es todavía una incógnita.