El Consell de l’Audiovisual de Catalunya (CAC) celebra su 25º aniversario en medio de una encrucijada que consideran "clave" para el futuro de la regulación audiovisual en Catalunya. En su discurso conmemorativo en el Parlament, el presidente del CAC, Xevi Xirgo, ha hecho hincapié en la necesidad urgente de actualizar las competencias del organismo ante un entorno comunicativo radicalmente diferente al de hace dos décadas. “Necesitamos un CAC independiente y a veces un poco incómodo, que crezca a base de competencias, y no un CAC que se apague o que no moleste a base de pellizcos”, ha asegurado Xirgo, apelando a una acción política decidida por parte del Parlament y el Govern.

El discurso ha girado especialmente en torno al reto que supone la desinformación y la avalancha de contenidos digitales no regulados. El presidente ha hecho un repaso de cómo ha cambiado el consumo informativo: “Hace veinticinco años, nosotros íbamos a buscar la información. Ahora estamos en el fenómeno que alguien describió como el ‘news finds me’”. Aun así, ha denunciado que muchas de las noticias que llegan a los usuarios no cumplen “los mínimos estándares de veracidad” y ha subrayado que esto no se puede abordar solo con “programas de alfabetización excelentes pero descoordinados”, sino con una estrategia de país.

De hecho, por eso ha pedido actuar ante las "fake news". "No podemos estar continuamente quejándonos de las fake news de la desinformación y no hacer nada, y no encararlo de verdad como un problema de país, de la sociedad, que es lo que es", ha dicho Xirgo, asegurando que esto no se resolverá con buena voluntad, sino con "valentía de la clase política" y del Parlamento. "La misma valentía y visión de futuro que tuvo en 2000 al crearlo, la deben tener ahora para dotarlo de las herramientas y las competencias necesarias para hacer frente a este cambio de paradigma", ha remarcado Xirgo.

Reclama competencias para la Generalitat

Ante la adopción de nuevas regulaciones europeas, el presidente ha alertado de que Catalunya corre el riesgo de quedar descolgada si no se posiciona con claridad. “Catalunya no se puede quedar fuera de juego”, ha dicho, lamentando que las competencias en materia audiovisual se estén atribuyendo “prácticamente todas a organismos de ámbito estatal”. Ha sido especialmente crítico con la gestión que se está haciendo desde el gobierno español: “Probablemente, no es una opinión compartida por todo el mundo, pero a mí me quedan pocas dudas de cómo se está haciendo en el Estado el despliegue de estas nuevas competencias: esto es, tarde y mal”.

Finalmente, Xirgo ha hecho un llamamiento a recuperar el espíritu pionero que impulsó la creación del CAC en el año 2000 y a garantizar que el organismo pueda hacer frente a los retos del presente y del futuro. Ha defendido que el CAC debería convertirse “más en el Consejo de la Comunicación de Catalunya que en el Consejo del Audiovisual”, para poder actuar con fuerza ante “un mundo híbrido” donde los límites entre prestadores tradicionales y nuevos creadores de contenidos se desdibujan. “Debemos dotarnos de herramientas... y sí, debemos poder poner algunas puertas al campo. Por complicado que sea”, ha concluido.

Rull alerta de la "polarización" a través de la comunicación

Josep Rull ha pedido a la cámara catalana de "poner el CAC al día". "No podemos quedar atascados", ha subrayado el presidente del Parlament, que considera el CAC como una "estructura de país y con mentalidad de Estado". Rull ha explicado cómo se llevó a cabo a través de una ponencia conjunta, que es un mecanismo poco habitual. "Aquella ley quería equiparar Cataluña a otros países europeos", ha reivindicado el presidente de la cámara catalana, que ha asegurado que el CAC tiene como misión velar por los derechos de los ciudadanos a recibir una información "plural, veraz, respetuosa con la diversidad y con los derechos humanos". El president de la cámara catalana ha puesto el CAC como una de las instituciones que forman parte del "corazón de la Generalitat". 

Rull ha recordado que el mundo de la comunicación es más "abierto y global" que nunca, y altamente "más fragmentado". "Han contribuido las plataformas audiovisuales, el consumo personalizado, la multiplicidad de canales y las redes sociales y sus algoritmos que han hecho desaparecer aquel espacio público común donde debatir", ha dicho Rull, que cree que la fragmentación de la esfera pública ha fomentado la "polarización". "Hacer que a los usuarios que consumen información digital les llegue aquello que ratifica sus creencias, y cada vez menos una información diversa y plural que fomente el debate y permita crear una opinión", ha dicho Rull, poniendo de ejemplos mensajes "cargados de ira". 

La consellera de Cultura, Sònica Hernández, ha reivindicado el trabajo del CAC estos veinticinco años y, ante la revolución comunicativa actual, considera que es más necesaria que nunca. "Tenemos que garantizar el lugar preeminente de los medios de comunicación en catalán y que ofrezcan una visión del mundo desde Catalunya", ha reivindicado la consejera, que ha subrayado que el catalán "no es ningún impedimento" para conquistar nuevos mercados. "Todo lo contrario, las informaciones con sello catalán es sinónimo de prestigio en todo el mundo", ha asegurado la consejera de Cultura, que también ha reivindicado la lucha contra las desinformaciones. "No hay verdades a medias. Hay verdades y mentiras", ha dicho, poniendo de ejemplo el cambio climático o los diversos conflictos mundiales. 

Genís Roca pide al CAC que se actualice

Por su parte, Genís Roca, empresario, profesor universitario y especialista en desarrollo de negocio y cultura digital, ha recordado cómo el CAC nació para "poner orden" a las televisiones que había en 2000. "Si el mundo ha cambiado, el CAC también tendrá que hacerlo", ha dicho Roca, que ha reivindicado las instituciones como "indispensables para saber vivir en sociedad siempre que estén actualizadas". Roca ha situado el contexto actual en el traspaso de una sociedad industrial a una sociedad tecnológica. "El CAC tiene más aspecto de regulador que de servicio público. Está más imaginario en las empresas que en la ciudadanía", ha lamentado Roca, que considera que los ciudadanos se deben sentir interpelados y ha reivindicado que hay que defenderse en internet para sobrevivir como nación.