Una prueba de que la oposición no escatimará esfuerzos para escenificar su oposición a los presupuestos del Govern, la encontramos en la reunión de la Mesa del Parlament. En la reunión de esta mañana ha habido una disputa entre JxSí y la CUP y los partidos de la oposición porque el partido del Govern y su "socio" han decidido tramitar la ley que crea el impuesto de activos improductivos por el trámite de urgencia.

Se trata de la ley que tiene que gravar los bienes de lujo, como los yates, a nombre de empresas. Los grupos de la oposición cuestionan que se apueste por el trámite de urgencia y que no se pida un informe para contrastar si activar este impuesto puede comportar un incremento del gasto presupuestario.

El vicepresidente primero del Parlament, Lluís Maria Corominas (JxSí), ha justificado en declaraciones en los pasadizos de la cámara la tramitación urgente y que no se pida un informe sobre el incremento de gasto.

"Resulta evidente -ha afirmado- que crear un impuesto implica incremento de recursos y no más gasto", ha recalcado antes de recordar que es una potestad de la Mesa decidir si se precisa este informe o no, y que los grupos que lo proponen tienen derecho a pedir la tramitación urgente.

Ciudadanos, el PSC y Catalunya Sí que Es Pot han criticado la urgencia de la tramitación y la falta de una memoria económica.

En las mismas reuniones de la Mesa y de la Junta se ha aprobado un nuevo calendario de plenos para el siguiente periodo de sesiones que se inicia en enero.

Este calendario quedará supeditado, no obstante, a la tramitación de los presupuestos y a la posibilidad de que los plazos se puedan ver incrementados o no en función de si hay algún grupo de la oposición que pida un dictamen al Consejo de Garantías Estatutarias.

Tal como ya se avanzó en la pasada reunión de la Junta de Portavoces, ha sido habilitada la segunda semana de enero para el debate en comisión de las enmiendas parciales a los presupuestos.