El abogado de los exiliados, Gonzalo Boye, se ha tomado con ironía el hecho de que el juez Pablo Llarena haya recibido el premio Ciudad de Burgos en la categoría de embajador del año.

"Ya que estamos puestos... que abra un consulado en Schleswig-Holstein", ha apuntado Boye.

El tribunal de este land alemán fue el que evaluó el caso del president Carles Puigdemont, y desestimó los delitos de rebelión y sedición. Ante ello, Llarena optó por retirar la euroorden que había emitido, en lo que fue una derrota jurídica del magistrado que realizó la instrucción sobre el referéndum del 1-O.