El lo volveremos a hacer que expresó al general en jefe de la Guardia Civil de Catalunya, Pedro Garrido, el martes en el acto de la patrona del cuerpo en Sant Andreu de la Barca ha servido a la candidata de JxCat, Laura Borràs, para ironizar sobre el papel de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado el 1-O.

"¿Qué es lo que volverán a hacer? ¿Volverán a buscar urnas que no encuentran? ¡6.000 urnas. Y no encontraron ni una!", ha preguntado en medio de los aplausos de los presentes. "¿Qué volverán a hacer? ¿El ridículo? ¿O quizás, pegarnos? ¿Volverán a saltar encima de nuestros cuerpos o arrastrarnos por el suelo? -ha continuado- No han encontrado las urnas, y todavía no han encontrado la manera de doblarnos. Y mira que se emplean!".

La candidata de JxCat ha participado en el primer gran acto de precampaña, en Terrassa, junto con los presidentes Quim Torra, Carles Puigdemont y Artur Mas, donde han presentado el lema de este primer tramo de la carrera electoral: "Ni un voto atrás"

Borràs, que ha diagnosticado que hay Guardias Civiles que han decidido hacer de políticos quizás porque "hay políticos que han renunciado a la política y hacen de cómplices de la represión, ha asegurado que l1-O es la gran victoria del independentismo y que la represión hace daño pero también hace al independentismo resiliente.

La candidata se ha sumado a los llamamientos a la movilización que han hecho también Torra y Puigdemont en el mismo acto. "¿Qué se piensan que se quedaremos en casa? Resignarse a la tiranía no forma parte del catálogo de valores de JxCat", ha advertido.

La candidata, que se ha declarado defensora a ultranza de la unidad, ha situado la propuesta de JxCat como una candidatura abierta y transversal: "Un movimiento transversal insólito, lo que más se parece a la unidad, que es lo que el país reclama y otros partidos no les conceden," ha asegurado.

Borràs ha abierto su parlamento cargando contra la celebración del 12-O. "Hoy no tenemos nada que celebrar, tenemos mucho que lamentar", ha advertido para describir a continuación esta festividad como una "celebración imperialista y beligerante".