El presidente del PDeCAT, David Bonvehí, ha situado este lunes el incremento de la fiscalidad como una "línea roja" en las negociaciones de los presupuestos del Govern, y ha advertido que no admitirán que se suba "la presión fiscal a los ciudadanos y sobre todo a las clases medias".

El dirigente demócrata ha hecho estas consideraciones poco después de que los Comunes plantearan al Parlament su propuesta para la negociación de los presupuestos, que contempla un incremento del 2% del IRPF para las rentas más altas, y al mismo tiempo que ERC se abría a negociar esta propuesta.

"Si el precio del presupuesto es cambiar nuestro modelo social o renunciar a nuestro proyecto político de avanzar en la república tendríamos que decir que no", ha sentenciado el líder del PDeCAT que, con todo, ha asegurado que si la propuesta de los Comunes sólo afecta al 2% de las rentas más altas estarían dispuestos a hablar.

La conclusión del planteamiento de los demócratas es, sin embargo, que "el IRPF ya presiona lo suficiente en Catalunya".

Bonvehí ha hecho estas valoraciones después de reunirse con el comité nacional de su partido, que incluye a la ejecutiva y los representados de los grupos parlamentarios.

Para el PDeCAT, es importante que los presupuestos salgan adelante, y reclama un crecimiento de todas las conselleries, con voluntad de hacer frente al Estado" del bienestar pero no sólo para políticas sociales, sino también para el crecimiento empresarial, territorio, infraestructuras o digitalización del país, ha advertido.

Paciencia con la Crida

El comité nacional ha abordado también las conversaciones sobre el encaje del PDeCAT en la Crida. Bonvehí ha pedido "paciencia y prudencia" para hacer el encaje de manera que sea asumido por la mayoría de la militancia. "Las prisas no son buenas consejeras", ha advertido.