El juez de la Audiencia Nacional que investiga el presunto espionaje que habrían sufrido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, así como el de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha citado al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, para que comparezca ante él. Se trata de una ronda de comparecencias para aclarar las circunstancias de la grieta de seguridad que se produjo en la Moncloa para que supuestamente los móviles de estos tres miembros del ejecutivo fueran espiados. Los hechos pasaron entre mayo y junio de 2021, y en ese momento Bolaños se encontraba a cargo de las medidas de control de las comunicaciones. Según informa El Confidencial, el ministro declarará en calidad de testigo junto a la exdirectora del Centro Nacional de Inteligencia, Paz Esteban, y los autores de los informes del Centro Criptológico Nacional que informaron sobre este presunto espionaje. El caso es que Bolaños, al llevar las riendas de la Secretaría de Presidencia, tenía como función velar por la seguridad de las actividades de Sánchez y “la asistencia en materia de administración económica, personal, mantenimiento y conservación, medios informáticos y de comunicaciones".

Aunque estas fueran las funciones de Bolaños, el Gobierno señaló como responsable de esta grieta en la seguridad de las telecomunicaciones del ejecutivo a Paz Esteban. Por ello fue cesada y por ello ahora tendrá que dar explicaciones ante la justicia. Tendrá que explicar, pues, las circunstancias en las que se produjo la infección de sus teléfonos móviles y conocer los controles habituales de seguridad implementados para evitar este tipo de agresiones. Según informa este mismo periódico, el ministro Bolaños no va a tener la necesidad de comparecer ante el juez de forma física, y podrá declarar por escrito. Lo mismo pasa con Sánchez y los otros miembros de su ejecutivo. Aun así, existe una posibilidad a medio camino entre la opción escrita y la presencial: declarar por videoconferencia. 

Malestar en la Audiencia Nacional

Por otro lado, y según informa El Periódico, hay cierto malestar en la Audiencia Nacional por el hecho de que haya transcendido qué testigos han sido citados por el juez José Luis de la Calma en motivo de este supuesto espionaje al Gobierno. Según el tribunal, el ejecutivo de Pedro Sánchez no ha sido lo suficientemente discreto a la hora de evitar que se filtren estas comparecencias. En el pasado Consejo de Ministros, por ejemplo, se habilitó a los funcionarios del CNI, a su actual directora y a Paz Esteban a “compartir información que conozcan con la Justicia” en relación con este espionaje que habría afectado a más de un miembro del Gobierno. Cabe destacar que el ministro de Agricultura, Luis Planas, también sufrió un intento de agresión.