Sólo cuatro años después de los atentados de Barcelona y Cambrils y con media pena cumplida, Said Ben lazza ya puede salir de la prisión.

Ben lazza es uno de los tres acusados que juzgaron por los ataques. Con él, Mohamed Houli, único de los miembros de la célula terrorista que sobrevivió, y Driss Oukabir se sentaron en el banquillo de los acusados. Ninguno de los tres intervino de manera directa en las brutales acciones terroristas, que dejaron 16 muertos y 140 heridos. Esta es la razón por la cual la Fiscalía no los pudo acusar de asesinato. Les imputaba delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia y fabricación de explosivos y conspiración por cometer estragos de carácter terrorista. Los magistrados de la sección tercera impusieron, sin embargo, una pena de 53 años y seis meses de prisión a Mohamed Houli Chemlal y de 46 a Driss Oukabir por delitos de pertenencia a organización terrorista; tenencia, depósito así como fabricación de sustancias o aparatos explosivos e inflamables de carácter terrorista; y estragos en tentativa de carácter terrorista en concurso con 29 delitos de lesiones por imprudencia grave.

La Audiencia Nacional ha dictado el auto de libertad por el cual Said Ben lazza puede salir por haber agotado ya el tiempo de prisión provisional sin condena firme. Estaba condenado a 8 años de prisión por un delito de organización terrorista. Pero la sentencia no es firme, está recurrida, y ya han pasado 4 años de prisión provisional. "Al vencer los cuatro años de privación de libertad a contar de su detención, límite legal que coincide con el de la mitad de la pena impuesta en sentencia no firme", lo tienen que dejar salir en libertad, tal como explica la resolución judicial a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat.

 

 

Como medidas cautelares, "se establece la obligación de fijar domicilio en España, y tiene que comunicar a
esta Sección cualquier cambio de lugar de residencia, y la prohibición de salida del territorio nacional sin autorización judicial, con retención del pasaporte y prohibición de obtenerlo en caso de no tenerlo o estar caducado". Pero las partes del caso pueden ahora recurrir esta libertad. Tienen tres días.

El papel de Ben lazza

Said Ben Iazza negó los hechos de acusación durante el juicio y, durante el turno final de palabra, dijo que no había tenido contactos ni con el imán de Ripoll Abdelbaki Es Satty, a quien se considera líder de la célula yihadista, ni con Alcanar.

 

La acusación contra él se centra en la supuesta ayuda que prestó a la célula al dejar la furgoneta en que Younes Abouyaaqoub realizó el atropello masivo en La Rambla, así como su documentación personal para, según la Fiscalía, ocultar la verdadera identidad del comprador de los productos químicos.