Berga estaba irreconocible esta mañana para los propios berguedans. A las nueve ya empezaban a llegar decenas de coches llenos de familias y grupos de amigos luciendo la camiseta blanca oficial de la Diada de este año. Con el paso de las horas, los grupos se han convertido en una multitud que se ha apoderado de las calles más céntricas de la ciudad.

"Ver Berga con este ambiente es sensacional, el resto del año somos cuatro gatos", exclama Isabel, que viene de Vilada, un pequeño pueblo al lado de Berga. Un río de gente ocupa de lado a lado las calles desde desde el passeig de la Pau, donde esta tarde tendrá lugar el acto central de la Diada, hasta el passeig de la Indústria, donde se ha organizado una Fira d'Entitats.

Muchas tiendas de la calle principal, la calle de la Ciutat, han decidido abrir sus puertas a pesar de ser domingo y han montado paradas delante de los establecimientos en un mercado improvisado de productos locales y estelades.

Entidades de todas las comarcas llamadas hoy a Berga han organizado todo tipo de actos para distraer en la mañana de la jornada, antes del gran "batec" a las 17:14. Grupos de portadores de gigantes, de castellers y de sardanistas han contribuido a convertir la ciudad en la República de la Cultura, tal como la han bautizado desde ANC y Òmnium.

Sin problemas de movilidad

Uno de los retos de la celebración de hoy era el recibimiento de más de 60.000 personas en un municipio donde viven poco más de 16.000. Berga cuenta con la experiencia de las multitudinarias patums que suponen la llegada de unas 5.000 personas, nada comparable al acontecimiento de hoy.

Según fuentes de la organización, hasta la una y media no se habían registrado paros destacables en cuanto a la llegada de vehículos. Más de 350 voluntarios están trabajando para ubicar a los 10.000 turismos y 200 autobuses que tienen previsto llegar antes de las tres del mediodía.

Muchos de los asistentes han optado por ser previsores y han llegado a primera hora de la mañana para ahorrarse atascos. "A las 9 ya estábamos por aquí y tenemos pensado marcharnos por la noche", explica una familia de Calaf que ha venido con sus dos hijos y han pasado la mañana participando en las actividades que había en todos los rincones de la ciudad.

Jornada excepcional

La alcaldesa de Berga y miembro de la CUP, Montserrat Venturós, ha asegurado en declaraciones a El Nacional que ésta es una "jornada excepcional como nunca se ha vivido" en la ciudad. "Lo vivimos con mucha ilusión y con ganas de ver cómo reacciona Berga ante todo eso", ha dicho. Venturós se toma esta jornada también como "un reto" a nivel personal en su carrera de alcaldesa que empezó el año 2015.

Berga reúne en sus 10 tramos a las comarcas del Berguedà, el Bages, Osona, la Anoia, el Ripollès, el Alt Urgell, la Cerdanya, el Solsonès, el Moianès y el Lluçanès. El acto será presentado por Màrius Serra y la deportista Núria Picas será la encargada de leer el manifiesto.